Fotos: El Siglo de Torreón y Agencias 03 de noviembre 2006 Miles de laguneros se congregaron en los cementerios para llevar flores a sus difuntos.






El teatro Nazas hizo una gran ofrenda.


Aquí imagen que forma parte del altar del Icocult Laguna.

Aquí el altar montado en la Casa del Cerro.

Con el fin de difundir y promover las tradiciones mexicanas, un grupo de familias montó coloridos altares de muertos en distintos puntos de La Laguna.




La celebración del Día de Muertos, devoción misteriosa donde se mezcla lo religioso y lo pagano, el miedo y la burla. A la muerte la ridiculizamos en caricaturas y "calaveras", y nos la comemos en dulce o pan.















Antes de encontrarse con sus difuntos, los deudos se toparon con las decenas o cientos de vendedores ambulantes que convirtieron el dos de noviembre en una verbena. Para ellos, la tristeza por los que ya no están, era lo de menos; lo importante era ganar un buen dinero.



