
Cuidado con la artritis: ¿cómo evitarla?
Se le conoce como artritis a la inflamación de las articulaciones. Se le suele encontrar, de manera habitual, en las muñecas, manos, rodillas, codos y pies. De acuerdo a la Secretaría de Salud, se trata de uno de los padecimientos más incapacitantes, por impedir una actividad diaria habitual, y que, contrario al pensamiento popular, puede ocurrir en cualquier etapa de la vida.
Causas
De acuerdo a Medline Plus, la artritis involucra la degradación del cartílago. Este funciona como una protección para la articulación que garantiza un movimiento suave y absorbe los impactos producidos por la propia articulación o los golpes. Al tener una poca cantidad de cartílago, los huesos se dañan y se rozan, lo que causa dolor, hinchazón y rigidez.
Si bien es un padecimiento que no tiene cura, el tratamiento oportuno puede reducir los episodios de dolor. A esto se suma que la falta de tratamiento lleva a dejar incapacitada la extremidad, el nacimiento de deformidades y, con ello, la reducción en la calidad de vida.

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Especialistas han formulado diversas teorías que explican sus posibles causas.Recomendaciones
Para prevenir, dentro de lo posible, la aparición de la artritis es necesaria una modificación en la vida diaria, de manera que los hábitos sea positivos para el cuerpo. Sin embargo, hay que hacer nota que la genética juega un papel en su aparición, lo que lleva a tener una predisposición mayor a ver la aparición de este padecimiento.
Mantener un buen peso. De acuerdo a Healtline, a mayor peso, es también mayor la exigencia para las articulaciones y el cartílago que cubre los huesos. De acuerdo a la Universidad John Hopkins, apenas cinco kilos de sobrepeso, exigen más de 15 kilos adicionales de resistencia para las rodillas. A esto se suma que, cuando se fortalecen los músculos, estos se encargan en buena medida de sostener el peso, para así no dejarle todo el esfuerzo a las articulaciones.
De esta manera, la combinación del ejercicio, y una alimentación sana, con una porción importante de alimentos antiinflamatorios (como el pescado, entre dos o tres veces por semana), llevan a obtener resultados que serán agradecidos por el cuerpo. El tipo de ejercicio debe ser determinado por un especialista, además del gusto y la capacidad de cada persona, aunque se recomiendan aquellos enfocados en estiramientos. Sin embargo, en cuanto a la actividad física, se debe hacer siempre con aumentos paulatinos, a fin de no dañarse, ya que se conecta con el siguiente punto.
Lesiones. Su aparición llevará a una aceleración en el deterioro de las articulaciones, que, en cierta medidas, es un proceso natural del envejecimiento. Sin bien ciertos tipos de accidentes no pueden ser prevenidos, hay otros, relacionados a las actividades diarias, que sí puede tener un control de riesgo. Por ejemplo, si se hace algún tipo de deporte, se requiere llevar la protección adecuada, desde el calzado indicado hasta las el equipo que exige su práctica.
No fumar. El tabaquismo tiene relación con el daño a los tejidos conectivos, lo que lleva al dolor en las articulaciones. Según Mayo Clinic, este efecto también sucede con el uso de cigarrillos electrónicos, o eso han indicado estudios recientes.
Higiene postural. Así como la alimentación, existen otras decisiones cotidianas que se pueden tomar para tener una mejor salud en las articulaciones. Desde la manera en que se sienta cada persona, la manera en que se sienta, puede llevar a mantener la salud de mejor manera. Agacharse y levantar objetos (sea por necesidad o por gusto, como cargar pesas), son momentos en los que se vuelve necesaria una adecuada educación, a fin de evitar problemas en las rodillas o en las espaldas.