¿Por qué tiemblan los párpados?

Los espasmos de párpado son movimientos involuntarios que están fuera de control. Existen diferentes tipos y cada uno posee una causa distinta.

De acuerdo con Mayo Clinic, a estos movimientos o espamos se les llama fasciculaciones oculares las cuales se dividen en tres tipos: mioquimia, bleofaroespasmo esencial benigno y espasmo hemifacial.

Mioquimia

Es el tipo más común y puede afectar a la mayoría de las personas en algún momento. Generalmente afecta un ojo a la vez en la parte superior o inferior del párpado durante un periodo breve. Puede llegar a repetirse después de algunas horas o días.

Los factores más comunes de la mioquimia son la fatiga, la cafeína, el estrés, sensibilidad a la luz y el consumo excesivo de alcohol. El sitio MedlinePlus añade que también puede ser efecto secundario de medicamentos utilizados para dolores de cabeza por migraña aunque esto se presenta con poca frecuencia.

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Algunos factores de riesgo podrían propiciar su aparición

Blefaroespasmo esencial benigno

Este movimiento comienza como un parpadeo en ambos ojos y es posible que se cierren los párpados con fuerza. Si esto ocurre, es necesario acudir de inmediato a un oftmalmólogo debido a que es señal de una afección más grave que puede afectar todos los aspectos de la vida.

Dura mucho más tiempo que la contracción común del párpado y suele ser bastante molesto. Aunque su origen no se conoce con exactitud, resalta que se puede deber a un mal funcionamiento de los ganglios basales, que son células del sistema nervioso.

Espasmo hemifacial

Es un tipo de contracción que afecta los músculos laterales del rostro incluido el párpado. Puede iniciar alrededor del ojo y extenderse a otras partes del rostro. Los espasmos hemifaciales pueden durar varios días o hasta meses; parecen manifestarse cuando un vaso sanguíneo ejerce presión sobre un nervio facial, según la American Academy of Ophthalmology.

¿Cómo tratar?

Las contracciones menos intensas suelen desaparecer sin ningún tratamiento, sin embargo, puede ayudar el dormir más tiempo, tomar menos cafeína, lubricar los ojos con gotas oftálmicas para hidratarlos y reducir el consumo de alcohol. En el caso de espasmos duraderos, el tratamiento más eficaz es la inyección de toxina botulínica, que es un relajante muscular. Si persisten, la cirugía se convierte en una opción.

Es necesario consultar a un especialista para que otorgue opciones de tratamiento según sea el caso.