
Mitos: osteoporosis y tercera edad
La osteoporosis es un padecimiento que puede llegar a incapacitar a las personas, y que aparece con relativa frecuencia en la población. Sin embargo, suele también estar rodeada de mitos en cuanto a su aparición, que pueden evitar que se tomen medidas para alejarse de que se presente algún día en el cuerpo. Los siguientes son algunos que se siguen repitiendo hasta estos días.
1. Solo aparece en adultos mayores
No es así. Es cierto que se puede encontrar con mayor facilidad en personas que se encuentran en la tercera edad, pero esto es porque algunos de sus factores de riesgos están asociados con esta etapa de la vida, de acuerdo a la Secretaría de Salud. Sin embargo, otros comportamientos pueden propiciar su desarrollo en cualquier edad.
Entre estos factores se encuentra el uso frecuente de sustancias como el alcohol o el tabaco, una dieta inadecuada o el sedentarismo, que se agrupan como aquellos que sí pueden ser modificados. También hay factores que no se pueden modificar, como herencia genética o incluso el desarrollo de problemas en la glándula de la tiroides o el uso prolongado de ciertos medicamentos, como los que se agrupan dentro de los corticoides.
2. No existe manera de detectarla
Falso. Es cierto que la osteoporosis es una enfermedad silenciosa, ya que el cuerpo no produce, durante su desarrollo, alguna clase de dolor o de marca visible. Sin embargo, la medicina ha desarrollado diversas herramientas y exámenes para conocer la densidad ósea.
Entre las que se pueden realizar se encuentra la densitometría, también conocida como DEXA o DXA, que se basa en rayos X para medir la densidad mineral en los huesos y conocer los riesgos de fracturas. A este examen se le considera preciso, por lo que puede permitir un diagnóstico oportuno para tomar las medidas pertinentes.
Es alrededor de los 30 años cuando se alcanza la máxima masa ósea. La recomendación general es que las mujeres que estén en los 65 años y los hombres de 70 comiencen a hacerse exámenes periódicos en sus huesos, para evitar darse cuenta, a través de fracturas, que tienen este padecimiento. Si es que se tienen otros factores de riesgo, en especial aquellos que no pueden modificarse, se pueden realizar desde antes.
3. Es más común en mujeres
Es cierto. La osteoporosis no está limitada al sexo, pero las mujeres son quienes más lo padecen. De acuerdo a la revista científica Elsevier, una de cada tres mujeres de más de 50 años la padece. En comparación, uno de cada cinco hombres en ese mismo rango de edad aparece.
Esta diferencia se debe a que la propia constitución de las mujeres tiene huesos más delgados y frágiles. A esto se suma una relación entre la osteoporosis y la menopausia, ya que hay una reducción en los estrógenos que terminan por afectar a la densidad de los huesos.
4. No se puede hacer ejercicio
Falso, ya que el ejercicio ayuda a fortalecer el cuerpo. Sin embargo, es necesario que antes de elegir una rutina, se debe consultar con un médico, para hacer exámenes profundos que permitan conocer los tipos de ejercicios que son adecuados para cada caso.
5. La cadera es una de las principales afectadas
Es cierto. En especial en adultos mayores, explica el sitio Densitometría Ósea, la cadera se suele fracturar con frecuencia, especialmente en los adultos mayores. Sucede lo mismo con la columna, las muñecas, los hombros y los tobillos, que están consideradas las partes del cuerpo que pueden tener efectos sensibles por la osteoporosis.