El agua afectó el 20 por ciento de la superficie de algodón. (EL SIGLO DE TORREÓN)
La lluvia que se registró el fin de semana causó daño en los cultivos del algodón, pues manchó la fibra y con ello degradó la calidad, en aproximadamente 2 mil hectáreas que faltaban por piscar.
Paulin Vázquez López, presidente de la Planta Despepitadora, Francisco I. Madero, la cual se encuentra en el municipio de San Pedro, mencionó que en ese municipio se establecen alrededor de 10 mil hectáreas de algodón y cerca del 20 por ciento de la superficie estaba en proceso de recolección.
Agregó que aunado a las afectaciones climatológicas hay otros factores que los afecta considerablemente, como el bajo rendimiento de las cosechas por la semilla de mala calidad, ya que en promedio de una hectárea se producían hasta seis toneladas y en esta temporada las cosechas son de dos a dos y media toneladas.
Otro problema al que se están enfrentando es la comercialización, pues el precio de la fibra oscila en los 76 centavos de dólar la libra, pero por el "súper peso" no les ayuda, ya que el dólar se cotiza en 17.40 pesos, por lo que por paca les pagan 6 mil pesos, cuando el año antepasado les pagaron en 10 mil pesos.
La "desaparición" de los apoyos al campo y el bajo volumen que se tiene en las presas, es otra problemática a la que se enfrenta el campo lagunero y es imposible que los algodoneros migren a otros cultivos, porque entonces provocarían una saturación del mercado y quebrarían la actividad, entonces sería un colapso.
"Ya no podemos meter otros cultivos porque el algodón es el cultivo rector y si esas 10 mil hectáreas si las metemos a los demás cultivos los perjudicamos, porque les bajamos el precio y quebramos el mercado, incluso si se ha ido bajando la superficie, porque hasta hace cuatro años se sembraban alrededor de 15 mil hectáreas de algodón, pero desde el 91 y 92 que no tenemos un ciclo completo, antes nos daban agua para hectárea y media de básicos, que es el frijol y maíz y ahorita nos dan agua para una hectárea, ocho áreas".
2,000 hectáreas que faltaban por piscar aproximadamente, se vieron afectadas.