(VAYRON INFANTE)
En el gélido martes la historia encontró un rincón de Gómez Palacio para abrir sus páginas al público. Ante un salón repleto, en un conocido centro de convenciones del centro de la ciudad, se presentó el libro “Mapimí, 425 años glorioso pasado y esforzado porvenir”.
La mesa estuvo integrada por Javier Guerrero Romero, cronista oficial de Durango; Cristina Matouk, directora del Museo de los Metales y Juan Cuitláhuac Ávalos. Moderó Marcela Pámanes, periodista y colaboradora de la revista Siglo Nuevo. Además, se contó con la participación artística del maestro Marco Aurelio Gutiérrez, quien aportó a la noche con la sonoridad de su guitarra clásica.
Se trata de una investigación realizada por los historiadores Miguel Vallebueno y Antonio Arreola. En entrevista para El Siglo de Torreón, Javier Guerrero Romero indicó que ambos autores abordan la historia del Real de Minas de Mapimí.
“Parte desde la fundación de la misión, a mediados de 1598 y hace un recuento prácticamente de cómo evolucionan los poblamientos y despoblamientos durante la época colonial, y la riqueza minera que motiva a repoblar a pesar de las condiciones adversas. Hacen un recuento en ese sentido”.
El reconocido historiador y autor de la novela Zambrano, agregó que el doctor Vallebueno incluye la paleografía de un documento fundamental: una descripción topográfica del Real de Minas de Mapimí de 1791.
“En 1790, el rey ordenó que se hicieran descripciones topográficas de todos los reales de minas de América. Lamentablemente, las de Nueva Vizcaya no son conocidas, son pocas las que se localizaron. Ésta en un hallazgo afortunado, trabajando el doctor Vallebueno en una investigación de Santiago Papasquiaro. La encontró desubicada de su expediente original. Es un hallazgo importante, lo descubre y hace la transcripción”.
El documento citado describe con amplitud la región, las ventajas y desventajas para poder trabajar el terreno, las distancias, haciendo énfasis en lo lejano del sitio y en los riesgos existentes en la explotación de las minas.
“Esta es una redición. El texto se hizo de manera original para conmemorar el 400 aniversario de Mapimí. Este año estamos celebrando el 425 aniversario, por lo tanto, es un texto que tiene 25 años. A esta segunda edición se le agrega un capítulo de Juan Ávalos, de cómo se hizo el proceso para la designación de Mapimí como Pueblo Mágico, que fue el primero que tuvo el estado Durango y se agrega otro capítulo del ingeniero Armando Valenzuela, en el que actualiza la información sociodemográfica-histórica de Mapimí para el 400-425 aniversario. Por lo tanto es una historia redonda, desde sus orígenes hasta el momento actual”.
Javier Guerrero también aportó que la importancia de Mapimí es toral para la conquista y población de la Comarca Lagunera, la cual era un asentamiento de grupos nómadas y seminómadas que vivían alrededor del desierto, quienes dificultaron el asentamiento. La fundación de Mapimí, junto a San Juan de Castas y Parras de la Fuente, las tres en 1598, favorecieron la posibilidad del desarrollo regional.
