HISTORIAS DE LA CREACIÓN DEL MUNDO
El avestruz no tenía dónde meter la cabeza.
El Señor se compadeció de él e hizo la tierra.
La jirafa no podía alcanzar las hojas tiernas de las ramas altas.
El Señor se compadeció de ella y le alargó el cuello.
La pulga no tenía un lugar para vivir.
El Señor se compadeció de ella e hizo al perro.
El hombre se sentía solo.
El Señor se compadeció de él e hizo a la mujer.
La mujer se aburría.
El Señor se compadeció de ella e hizo a la serpiente.
¡Hasta mañana!...