Una empresa comercializadora no produce ni hace el producto, sólo se encarga de su venta una vez comprado.
De acuerdo con la página oficial de la empresa NUSMAS, S. A de C. V., esta empresa no se dedica a fabricar muebles, tampoco tiene un catálogo, y mucho menos un teléfono de contacto para que algún cliente pueda contratar sus servicios, mismos que además de ser poco claros, hacen referencia a servicios de administración, capacitación y contratación de personal.
Como se informó en este medio, apenas transcurridos 15 días de haber tomado posesión como alcalde de Torreón, Román Alberto Cepeda González, gastó 1 millón 837 mil pesos de recursos públicos en la compra de muebles y decoración de alta gama para remodelar su despacho y el de la secretaria del Ayuntamiento, Natalia Fernández Martínez.
De acuerdo con la escueta información del sitio web de la empresa, "Nusmas es una comercializadora y prestación de servicio para administración de proyectos, consultoría de proyectos, implementación de oficinas de proyectos, administración de personal, capacitaciones y contratación de personal".
EMPRESA COMERCIALIZADORA
Es decir, no venden muebles, como es sabido, una empresa comercializadora no produce ni hace el producto, sólo se encarga de su venta una vez comprado.
Entonces, ¿a quién compró el Ayuntamiento de Torreón 48 artículos de alta gama que consideró como necesarios para su operatividad (entre ellos 4 cojines de 13 mil pesos para el despacho del alcalde), pues de acuerdo con lo que señala la empresa sus actividades son más que ambigüas.
"Realizamos la implementación de servicios de ingeniería de campo para actividades programadas y/ o correctivas, en el marco de una metodología propia", indica en su sitio oficial donde no explica gran cosa, solo indica que ofrece servicios técnicos y de consultaría, además de soluciones industriales. No viene ningún número telefónico de contacto ni correo en dónde pedir informes, mientras que sus oficinas, de acuerdo con su ubicación, tampoco corresponden con lo que anuncian.