Ejes. La Orquesta Sinfónica de pequeños lectores se basa en la inteligencia emocional. (ARCHIVO)
Como parte de los proyectos de responsabilidad social que se implementan en el Colegio Hecat, fue que nació la creación de la Orquesta Sinfónica de pequeños lectores que tras la expresión de Abril, una de las alumnas de la institución que manifestó su deseo de ser escritora, Renta Chapa (fundadora de la iniciativa), comenzó a idear un plan de trabajo que no sólo involucrara a la pequeña, si no a otros alumnos.
Al irse entretejiendo el proyecto, Chapa recibió la invitación de meter la iniciativa para disponer de un fideicomiso por parte de Santander que lanzó una convocatoria para apoyar algún programa que se basara en el bienestar de niños y niñas. Fue así que pudieron acceder a 100 mil pesos para arrancar actividades.
"50 mil pesos para honorarios y 50 mil para materiales didácticos, lanzamos la convocatoria y demás y comenzamos".
Chapa dijo que fueron la única propuesta a nivel nacional seleccionada que tenía que ver con la lectura. De eso ya hace dos años y la primera inscripción contabilizó sólo a 14 niñas. La segunda registró 47 partcipantes, desde niños de preescolar. Ahora lo que se busca es que el proyecto continúe e invitan a más pequeños a matricularse, y ya no sólo los ligados a la institución donde se dio su nacimiento.
Lo interesante de esta iniciativa es que se basa en tres ejes fundamentales, que son la inteligencia emocional, la música y la lectura.
Un ejemplo es recurrir a compositores de los que se han escrito libros y conocer por ende su historia y su música. Al leer más allá de la obra de los artistas, se conoce su vivencias y eso crea empatía e invita a los pequeños a la inspiración.
