Señaló que de las 900 personas que albergan en Cristo Vive, la mayoría, menores de 30 años de edad, han presentado antecedentes suicidas. (ARCHIVO)
Eduardo Pacheco, representante legal de Cristo Vive, informó que el 30 por ciento de las personas que han acudido al albergue, han tenido intenciones suicidas, los cuales incluso mantienen aún las cicatrices en su cuerpo, tras sufrir estas experiencias.
De acuerdo a lo que informó que en lo que va del año se han recibido 250 llamadas de personas que se atreven a dar a conocer su problema, de los cuales no todos han tenido continuidad.