El recorrido por las trece estaciones duró más de dos horas, bajo un clima de 28 grados. (EL SIGLO COAHUILA)
La diócesis de Saltillo organizó el Viacrucis número 43 con la asistencia de más de 3 mil personas.
Este año se dedicó la última estación de la Pasión de Cristo a los derechos humanos. Al llegar al último punto se proclamaron y oraron por las personas que viven en extrema desigualdad, como las víctimas de trata de personas “niños y mujeres que son vendidos como mercancía sin valor”.
La escenificación estuvo a cargo de la Iglesia del Ojo de Agua. Inició en las escalinatas a las 13 horas con la participación de más de 200 actores.