Hasta ahora las investigaciones científicas sobre los beneficios, están un una etapa muy temprana, con el tiempo se han reportado efectos significativos. (ARCHIVO)
Bañarse es una parte esencial de una rutina saludable, y más aún si se hace en base a las necesidades que hace falta atender, ya que la temperatura del agua puede ofrecer diferentes beneficios y que son importantes conocer cuáles son.
En el caso del agua fría, muchos aseguran que una ducha diaria mejora la circulación, alivia el estrés, luce una piel más saludable, aumenta su lucidez mental y fortalece el sistema inmunológico.
Al tener contacto con la piel, la ducha fresca produce un "shock" para el organismo, que acelera el ritmo cardíaco, aumenta la circulación sanguínea, se libera adrenalina, y lo más importante es que no tiene efectos negativos para la salud.
En el caso de los baños con agua caliente, ayudan a relajar los músculos rígidos, reduce la ansiedad, y funciona como un descongestionante natural para síntomas de resfriado, además de matar los gérmenes a los que se está expuesto todos los días.
"Aunque hasta ahora las investigaciones científicas sobre los beneficios, están un una etapa muy temprana, con el tiempo se han reportado efectos significativos, y hay quienes sienten que les funcionan y no dejan de hacerlo", declaró para el portal de BBC, Chris van Tulleken, médico británico y presentador de televisión de la BBC ONE.
Aquí te compartimos la información más detallada sobre los beneficios que aportan las duchas de agua fría y caliente.