Junto con la vitrina en donde está la piedra del Everest fueron inauguradas las dos nuevas áreas de Geología y Orografía así como México en la Cumbre. (Fotografías de Érick Sotomayor)
POR NIRIA RAMOS MARÍN
EL SIGLO DE TORREÓN
TORREÓN, COAH.- Como símbolo de la tenacidad y capacidad de los coahuilenses para conquistar todo lo que anhelen, ayer viernes por la mañana fue develada la piedra del Everest en el Museo de los Metales dentro del marco de los festejos por su primer aniversario.
La pieza fue donada por Ricardo Torres Nava, coahuilense que fue el primer mexicano y latinoamericano en escalar la cumbre más alta de cada continente, logro denominado como “El Gran Slam o Seven Summits Doble Versión”, siendo por Asia el famoso Everest.
Antes de la donación e inauguración de la pieza Ricardo Torres Nava ofreció una conferencia de prensa en la que habló acerca de su trayectoria, sus motivaciones y hasta sus momentos más difíciles como cuando hubo racismo dentro del equipo con el que le tocó escalar el Everest: “Eso sucede cuando ven que tú funcionas mejor que los demás, se generan envidias y las ‘grillas’, pero ese grupo nunca pudo alcanzar la cumbre del Everest por su soberbia”.
En el panel, acompañado por el ingeniero Fernando Alanís, director general de Industrias Peñoles, y Leopoldo López, jefe de vinculación de la misma empresa; el alpinista explicó que la pieza que a partir de hoy se exhibe en el Museo de los Metales la tomó cuando llegó a la cumbre más alta del mundo: “Esa roca significa el esfuerzo de muchos años y significa un valor afectivo que no tiene precio... Es una roca pequeña en tamaño pero grande en significado”, dijo el admirado coahuilense.
La piedra aunque pareciera muy pequeña a la vista es una pieza muy peculiar, y dice Torres Nava que la característica que más le llamó la atención y el motivo por el cual decidió tomar precisamente esa roca en la cima del Everest fue por unos destellos que despide: “Que en la cumbre del Everest hasta resultan algo mágico”.
Explicó que es una piedra en blanco y negro que para él simboliza una alegoría de lo bueno y lo malo “la luz y la oscuridad pero con esos destellos”.
El alpinista añadió que decidió dejar la piedra en el Museo de los Metales porque hace tiempo vino a dar una conferencia y fue invitado a dar un recorrido por el recinto, pero algo le faltaba al museo: La piedra del Everest.
SE ENRIQUECE EL ACERVO
Antes de dar a conocer la esperada pieza, el director general de Peñoles leyó un emotivo pensamiento del alpinista y posteriormente se procedió a la donación de la pieza mediante la firma de un convenio: “En este momento la cumbre de la Plata en el Mundo se une con la roca de la cumbre del mundo”, dijo Leopoldo López.
Luego Torres Nava leyó un texto sobre el inolvidable momento en que llegó a la cumbre del Everest y seguido a esto el director general de Peñoles otorgó al alpinista una placa en reconocimiento a sus importantes logros.
El momento esperado llegó y se develó la vitrina en la que desde ayer viernes se resguarda la roca que representa además de una muestra geológica, el gran poder que tienen los coahuilenses en su espíritu y en su físico.
Con esta donación se abren a partir de hoy sábado dos áreas en el museo, una denominada México en la Cumbre dedicada al alpinista y otra que se llama Orografía.
