Hace algunos días una buena amiga me preguntó que si sabía cuál era la parte más importante de nuestro cuerpo. En ese momento, mi mente voló desde la cabeza a los pies, y lo primero que se me ocurrió fue decirle: “Los oídos”. ¿Por qué los oídos? Porque cuando uno es joven uno piensa en el sonido, algo muy importante para nosotros, por eso contesté esta pregunta. Ella dijo: “No, muchas personas son sordas y se las arreglan perfectamente. Pero sigue pensando hasta que creas que tienes la respuesta correcta. Pasaron varios minutos antes de que yo volviera a darle otra respuesta, la cual esperaban que en esta ocasión fuera la correcta, por lo que dije: “La vista, ya que ésta es muy importante para todos, y por lógica deben ser nuestros ojos”.
Ella nuevamente me miró y me dijo: “Estás aprendiendo rápidamente, pero la respuesta tampoco es la correcta porque hay muchas personas que son ciegas, y salen adelante aún sin sus ojos”. Continué pensando cuál era la solución. Pasaron otros minutos, y di varias respuestas más, y ante mis respuestas la suya era “No, pero estás poniéndote más inteligente continúa, pronto acertarás”. Recuerdas que el año pasado, tu hermano menor murió, y que todos estaban dolidos. Recuerdas que ésta era la tercera vez que los vi muy adoloridos y llorar.
¿Recuerdas el primer sentimiento cuando tu padre murió; la segunda, cuando tu madre y la tercera por tu hermano menor? Ese día estaban todos acompañados por familiares y amigos, incluyéndome a mí: “¿No sabes todavía cuál es la parte más importante del cuerpo?”. Me sorprendí cuando me preguntó justo en ese momento: ¿cuál era la parte más importante del cuerpo humano? Había creído que era un juego entre ella y yo, pero ella vio la confusión en mi cara y me dijo, “esta pregunta es muy importante” para cada respuesta que me diste en el pasado, te dije que estabas equivocado y te he dicho porque... de pronto vi que sus ojos estaban llenos de lágrimas, y la abracé, fue entonces cuando ella apoyada en mí, me dijo: “Amigo, la parte más importante del cuerpo humano es tu hombro”. Le pregunté, ¿por qué?, ¿porque es la que sostiene mi cabeza?, y ella me respondió: “No, es porque puede sostener la cabeza de un ser amado o de un amigo cuando llora. Todos necesitamos un hombro para llorar algún día en la vida, yo sólo espero que tengas amor y amigos, y así siempre tendrás un hombro dónde llorar cuando más lo necesites. Sabrás entonces por qué te pregunté esto, para que sepas que puedes contar conmigo, como a mí me gustará poder contar contigo y poder ser tu amiga por siempre...”.
C.L. Ma. Rosa del Valle de Guzmán, miembro activo del Club de Leones de Torreón, Nous, A.C., egresada del colegio La Paz, así como de la Facultad de Medicina de la UAC; con postgrados en Londres, Inglaterra y una trayectoria dentro del Leonismo desde 1972, ingresando como cachorrita al Club de Leones de Torreón, A.C.; dado al gusto que siente de saber que comulgaba con las mismas opiniones de su padre Pablo del Valle Sánchez, past-presidente del Club, al cual perteneció por muchos años como miembro prominente. El C.L. Ma. Rosa del Valle, gracias a su empeño y dedicación en el servicio se hace acreedora para que ocupe el cargo de soberana en dicho club, y posteriormente la de representar como tal, al gobierno del Distrito B-2 que corresponde a los Estados de Chihuahua, Zacatecas, Durango y parte de la Región Lagunera.
En su niñez como cachorrita fue designada en diversas ocasiones como pajecita, y en su juventud fue nombrada princesa y posteriormente como reina. Participó en muchas actividades tanto en el club como juntas de gabinete y convenciones que se celebraban a nivel Distrito B-2, así como en los bailables que se organizaban en ese tiempo con aquellas melodías en la que se incluía Mony, mony. Ahora, como miembro y fundadora del Club de Leones de Torreón, Nous, al cual pertenece. Desde el año de 1995, mismo que ha representado en diversos cargos como son presidente, secretario y tesorero, actualmente gerente de proyectos a nivel internacional, los clubes todos están encaminados en beneficio de la gente que menos tiene. Este club se ha caracterizado por las operaciones de cataratas o problemas de la vista, el cual tiene en su haber a la fecha 1,000 operaciones de cataratas gracias a las tres subvenciones que ha recibido por parte del LCIF (Fundación Internacional de Clubes de Leones).
El club al que pertenece está integrado por 20 socios, los cuales se reúnen el primer y tercer lunes de cada mes, todos los miércoles brindan servicio en un local que tienen denominado casa hogar que pertenece al DIF que se encuentra ubicado en la colonia Nueva Rosita, y los martes y jueves en su consultorio donde atiende a las personas que necesitan operación de cataratas, donde programa las cirugías y entrega el material que se necesita, para que los pacientes acudan al centro de salud, donde serán operados por los médicos Juan Carlos Sánchez Coria y Carlos Sánchez Rusek. Dentro de los proyectos trazados por el C.L. Ma. Rosa del Valle, estuvo la posibilidad de poder adquirir un microscopio fino estalium 4, gracias al trabajo que realizan cada año durante la estancia que dura la feria.
Como dama y compañero León Ma. Rosa del Valle, es todo un ejemplo viviente. Ella está casada con Germán Guzmán Valdés, con quien procreó tres hijos: ¡Felicidades!, y enhorabuena compañero León. “Pensamiento Leonístico”: Cuántas veces dudamos del valor que merecemos, y que podemos conseguirlo si no lo proponemos. “Nosotros servimos”.
