
Su salud Oral
GEROCIENCIA (PARTE III)
"Por un mundo mejor para las generaciones futuras, pongamos nuestra visión en la misma dirección: hacia una longevidad sana, mediante la prevención en todos los aspectos, desde la niñez." Liliana Acuña Cepeda.
EL FUTURO ES DE LOS ADULTOS MAYORES
Es preocupante observar el cambio demográfico global, con un aumento sostenido de personas adultas mayores. Esta realidad genera una sensación de urgencia y, a veces, de impotencia. Es momento de alertar tanto a jóvenes como a adultos de que su bienestar futuro dependerá, en gran medida, de la calidad de vida que cultiven desde ahora.
Como profesional de la salud oral, considero que todos los temas abordados en el diplomado de Gerodontología convergen en una misma reflexión: todo lo aprendido debe orientarse a trabajar en favor de las personas mayores. Por esta razón, mi ensayo se centró en la Gerociencia, una herramienta clave para promover su salud, asesorarlos y apoyarlos con recursos humanos capacitados.
El envejecimiento no es una enfermedad, sino un proceso cronológico. Para que las personas puedan disfrutar de una longevidad saludable, debemos actuar en conjunto desde hoy, comenzando con la conciencia de que, con disciplina desde la juventud, es posible lograrlo.
Para dejar huella y alcanzar la felicidad, debemos cuidar nuestro templo: cuerpo, mente, alma y espíritu. No desperdiciemos salud en la juventud, para que el envejecimiento llegue más tarde y con mejor calidad de vida.
La Gerociencia, como generadora de conocimiento, tiene el potencial de provocar cambios profundos incluso en la forma en que pensamos sobre el envejecimiento, ayudando a combatir el edadismo: una forma de pensar (estereotipos), sentir (prejuicios) y actuar (discriminación) hacia los demás o hacia uno mismo por razón de la edad.
El edadismo está presente en todos lados: en nuestras instituciones, nuestras relaciones y, a menudo, en nosotros mismos.
A las personas adultas mayores hay que escucharlas con paciencia y respeto. Son ellas quienes nos han legado todo aquello que algún día nosotros transmitiremos a las nuevas generaciones.
Creo firmemente que el deterioro físico y emocional sería menos doloroso si cada uno de nosotros, al tener un familiar, amigo, vecino o compañero de trabajo mayor de 60 años, comenzara por prestarle atención, tratarlo como un igual, respetarlo y apoyarlo. Basta con un saludo, una sonrisa, un buen deseo. No subestimarlos, excluirlos ni maltratarlos.
Desconocer el fenómeno llamado "Silver Tsunami" es quedar al margen de una discusión mundial que ya ocupa a la mayoría de los países desarrollados. Los cambios demográficos traerán desafíos económicos y sociales que exigen que nos preparemos hoy para asegurar un bienestar digno a las generaciones mayores.
La Gerociencia propone un enfoque preventivo de la salud, entendiendo la vida como un continuo en el que el estilo de vida y los factores que nos afectan desde jóvenes determinarán la calidad de nuestro envejecimiento. Debemos dejar atrás los mitos que rodean esta etapa y construir, desde hoy, un futuro digno para todas y todos.