
El Siglo de Torreón / Enrique Castruita
Laguneros llenaron el Teatro Nazas para disfrutar de La obra que sale mal, una comedia donde caídas, errores y un cadáver inquieto hicieron estallar de risa a todos. El público, compuesto por familias, amigos y parejas, vivió una noche única llena de sorpresa y buen humor.
Cada tropiezo en escena se convirtió en motivo de carcajadas, y la complicidad entre actores y espectadores hizo que la función fuera una experiencia memorable. Al final, la ovación fue unánime para un elenco que convirtió el caos en diversión pura.