
Protocolo de Estambul anularía investigación a las camaristas del Holiday Inn
La aplicación del Protocolo de Estambul en el caso de las dos camaristas acusadas de robar 1.5 millones de pesos en el hotel Holiday Inn podría derivar en la reposición total de las investigaciones y hasta en una indemnización económica por presunta tortura, explicó el abogado penalista Luis Ángel Liñán González.
El especialista en derecho indicó que la apertura de este mecanismo internacional obliga a las autoridades mexicanas a revisar de nuevo el proceso judicial, tomando en cuenta denuncias de violaciones a derechos humanos.
“Este protocolo es un manual para investigar y documentar casos de tortura. Su aplicación podría llevar a reponer el proceso desde cero”, explicó Liñán González.
El jurista detalló que el procedimiento no necesariamente tiene efectos inmediatos, pero sí establece consecuencias importantes: la posible nulidad de investigaciones y la reparación económica a víctimas de tortura.
Posibles efectos en la investigación y reparación del daño
En el caso de Clarissa, una de las camaristas señaladas, podría acceder a una indemnización si se confirma que fue víctima de tratos violatorios a sus derechos humanos.
El abogado aclaró que deben diferenciarse dos aspectos: el proceso penal por el presunto robo y la investigación paralela sobre tortura, donde las autoridades tendrían que reparar el daño.
“Una cosa es la tortura sufrida por el imputado y otra el procedimiento por el delito de robo. Ambas investigaciones corren en vías distintas”, puntualizó.
Según el especialista, si el protocolo concluye en favor de la imputada, la Fiscalía tendría que reiniciar la investigación, invalidando pruebas y reconstruyendo el caso desde sus cimientos.
Autoridades competentes y aplicación obligatoria
Liñán González explicó que cualquier autoridad mexicana está obligada a acatar el Protocolo de Estambul, pues se trata de un tratado internacional firmado por el Estado mexicano.
La apertura puede ser solicitada ante la Comisión de Derechos Humanos, un juez federal, de distrito o local, quienes deberán conducir la valoración del caso.
“La autoridad que aperture el protocolo será la responsable de emitir la resolución correspondiente y definir si se ordena reposición del proceso o indemnización”, indicó el jurista.
El caso de las camaristas del Holiday Inn sigue generando debate público, pues podría convertirse en un precedente nacional sobre la aplicación del Protocolo de Estambul en procesos locales.