
(SERGIO A. RODRÍGUEZ)
El luchador profesional conocido como “Baby Rap” será presentado el domingo ante el juez penal, acusado de la brutal agresión que mantiene a un vecino en estado crítico.
La Fiscalía General del Estado informó que la fecha para la audiencia inicial será fijada por el juez de control, estimando su realización el domingo, dentro de los términos constitucionales.
La víctima, identificada como Néstor Alejandro Zamora Ledezma, de 36 años, permanece en coma y con daño cerebral severo, tras recibir la golpiza en la colonia Colinas de Santiago.
De acuerdo con la denuncia presentada, el ataque ocurrió la mañana del lunes, en el interior del domicilio del luchador, cuyo nombre real es Diago “N”.
Familia exige justicia y sanciones ejemplares
Alejandra Ledezma, prima del afectado, exigió que el caso no quede impune y que se apliquen sanciones ejemplares contra el presunto responsable de la agresión.
“Mi primo está inconsciente, con daño cerebral. Está luchando por su vida. Queremos justicia y que se tomen medidas contra el responsable”, expresó visiblemente afectada la denunciante.
La familiar recalcó que una persona con entrenamiento profesional no debe utilizar su fuerza física para causar lesiones graves, pidiendo que se le retire la licencia como luchador.
Agregó que, aunque la denuncia fue interpuesta ante la Fiscalía, la familia teme que el agresor obtenga su libertad y el hecho quede sin consecuencias legales reales.
Preocupación social y seguimiento al caso
El estado de salud de Néstor es sumamente delicado y su pronóstico médico reservado, por lo que la comunidad se mantiene pendiente del desarrollo de la investigación y del proceso judicial.
Vecinos y conocidos se han sumado a las exigencias de justicia, demandando que las autoridades actúen con firmeza y garanticen que no haya privilegios para el acusado.
La Fiscalía reiteró que continuará reuniendo pruebas para sustentar la acusación en la audiencia inicial y buscar medidas cautelares acordes a la gravedad de los hechos denunciados.
Este caso ha generado preocupación pública por la violencia ejercida por deportistas profesionales fuera del ring, reavivando el debate sobre controles y responsabilidades dentro del deporte de contacto.