VARIACIONES OPUS 33 SOBRE EL TEMA DE DON JUAN
Recordar sus recuerdos. Tal es ahora el principal mester del caballero sevillano.
Anoche se le apareció en la duermevela el fantasma de una mujer. Don Juan es afortunado: todos los fantasmas que se le aparecen son femeninos. Éste le dijo:
-Supe que por tu amor iba a condenarme, pero preferí ir al infierno contigo que al cielo sin ti.
En los brazos de aquella hermosa dama Don Juan conoció cada noche un paraíso, y conoció el infierno cuando ella lo dejó para irse con la muerte. Ahora es hombre escéptico. No cree ni en el infierno ni en el cielo de que hablan los predicadores. Cree sólo en los cielos y en los infiernos de la vida.
Don Juan de nada se arrepiente. Su único temor es arrepentirse de algo cuando el final le llegue. Pero tiene una certidumbre: si de algo llega a sentir arrepentimiento, inmediatamente se arrepentirá de haberse arrepentido. Y no es que Don Juan sea soberbio. Es, simplemente, que Don Juan es Don Juan.
