Una de las características más típicas de la clase política, pero sobre todo de los regímenes socialistas, es la incongruencia; esto es, la pauta diferencial entre lo que se dice y lo que se hace.
Muestra de ello lo tuvimos muy recientemente con los llamados festejos de los 700 años de la fundación de Tenochtitlan, que ya se habían celebrado igual en el sexenio anterior en el 2021 con todo y moneda conmemorativa incluso; algo que el viejo/"nuevo" régimen celebró en la capital del país con un derroche de parafernalia dudosamente azteca o meshica en que la presidente pretendió vender en su discurso que "México no existe gracias a los españoles", ocurrencia antihistórica tan desafortunada como xenófoba y racista por partida doble pues no solo atenta contra nuestras raíces hispánicas (la titular del Ejecutivo no lo dijo en nahuatl ni en otomí) sino que también pretende borrar de plumazo a las más de 200 etnias que no solo no se identifican en lo absoluto con los mexicas a los que padecieron, y que tampoco son reconocidos desde la mezquindad de este tipo de celebraciones centralistas.
Como complemento a este teatro en el que siempre se evoca a indígenas muertos solo para para seguir olvidándose por completo de los que aún viven en el más completo abandono tanto como en la inseguridad, trascendió esta semana que Beatriz Gutiérrez Müller, artífice de toda la campaña hispanófoba en la que junto con el expresidente López pretendía exigir nuevamente disculpas a la Corona Española-disculpas ofrecidas ya por Juan Carlos I durante el Foro de las Américas desde Guadalajara en 1991-el sexenio pasado, ahora obtuvo la nacionalidad española, misma que había solicitado a escondidas desde el mes de Mayo, donde ha tenido que jurar lealtad a Felipe VI como Rey de España y a la Constitución de la Monarquía.
Bajo la excusa de que su hijo Jesús Ernesto estudiará Derecho en la Universidad Complutense de Madrid y haciendo uso de la denominada Ley de Memoria Democrática que permite este trámite a descendientes de españoles es que la ex No Primera Dama que rechazó todas las responsabilidades públicas de su puesto (más nunca el presupuesto del Gobierno Federal) estrena casa en el lujoso barrio de La Moraleja en Madrid -donde viven magnates y celebridades como David Beckham- luego de reportar como nueva súbdita española varios millones de dólares como parte de sus ahorros desde el 28 de Julio de este año para alejarse de la tormenta política que se avecina en México, pero tampoco es la única.
El periodista Salvador García Soto reveló también que tanto Pío López Obrador y Martín Jesús López Obrador, ambos hermanos del expresidente de México, iniciaron trámites para obtener el pasaporte español, con la posible finalidad de obtener la ciudadanía española, desatando una serie de especulaciones sobre sus verdaderos motivos de fondo.
Según información proporcionada a García Soto, los hermanos Pío y Martín Jesús López Obrador habrían comenzado los trámites para conseguir el pasaporte español. La base de esta solicitud se encontraría en lazos familiares, específicamente en su abuelo José Obrador Revuelta, quien nació en España.
Este posible paso hacia la doble nacionalidad ha generado diversas interpretaciones pues Pío López Obrador es recordado como cofundador de Morena junto con su hermano y por haber estado en el ojo del huracán debido a un escándalo de financiamiento de campañas con dinero en efectivo, lo que derivó en una demanda contra el periodista Carlos Loret de Mola. Por otra parte, Martín López Obrador también ha sido vinculado a la recepción de efectivo con los famosos "sobres amarillos", por lo que el que ahora busquen residencia en la Madre Patria o la doble nacionalidad, añade más preguntas que respuestas.
Independientemente de que tan controversiales personajes hayan tenido la cara de tramitar y conseguir la ciudadanía del Reino al que tanto habían repudiado publicamente desde el terraplanismo que es la Leyenda Negra, mientras estuvieron en el poder, no deja de llamar la atención algo igualmente absurdo y no menos indigno: que bajo el gobierno socialista de Pedro Sánchez se les hubiera concedido.