">

Columnas Social columnas editoriales SOCIALES

Columnas

Las palabras tienen la palabra

LOS ACCIDENTES SON SIN QUERER

JUAN RECAREDO.-

Los accidentes desafortunadamente suceden… sí claro, pero siempre son causados porque algo que falla y aunque en ocasiones es muy difícil predecir cuándo sucederá uno, sí se pueden tomar medidas para prevenirlos… ¡claro que sí!

Escucho con frecuencia que dicen que los accidentes se deben a "fallas humanas" y yo digo que todas las fallas son humanas, porque aunque sea una cosa la que falla y por ello se produce el accidente, existe una persona que creó, construyó, reparó o revisó tal cosa, pero lo hizo mal y por eso falló.

Entonces dicen: "Bueno, se trató de un error involuntario" y ahí sí, "perdóneme, pero discúlpeme" -como decía una tía mía- porque "error involuntario" se trata de una frase redundante, porque todos los errores son involuntarios y si no lo son, entonces no se trata de un error, sino de una acción de mala leche, con la voluntad de dañar a alguien… un atentado, pues.

Ya que andamos con frases redundantes, otra que he escuchado es accidente fortuito. Todos los accidentes son sucesos inesperados y la palabra fortuito quiere decir precisamente eso: algo que sucede por casualidad. Por eso se considera una frase redundante, a menos de que trabaje usted en el mundo de los seguros, porque un amigo que trabaja en ese ambiente y que usa la frase "accidente fortuito", me explicó -porque yo no sabía- que en el argot de los seguros, esa frase se refiere a un accidente en el que ninguna de las partes tiene la culpa, y por eso no se pudo evitar que sucediera.

A veces nos referimos a un accidente como un "incidente", que es algo que altera el desarrollo normal de algo, o bien, una pelea entre personas, pero no es precisamente un accidente. También usamos la palabra "percance", que es también un daño, un problema, algo imprevisto que es en nuestro perjuicio.

Y aquí nos encontramos con esas palabras, tan parecidas, que no debemos confundir: "perjuicio" y "prejuicio". Todo cambia si intercambiamos la posición de la 'r' y la 'e' en el prefijo de estas dos palabras: "per-juicio" es lo que "per-judica", lo que hace daño, mientras que "pre-juicio" es esa idea o juicio que se hace de alguien o algo antes de tiempo, sin conocerlo bien. Claro que no son lo mismo, pero la raíz de ambas palabras sí lo es: viene del latín praeiudicare que significa "juzgar previamente". O sea que ambas palabritas, prejuicio y perjuicio, nacieron siendo la misma -porque el juzgar a alguien antes de estudiar las pruebas le haces un daño- pero con el tiempo se fueron separando y ahora tienen usos diferentes.

Y antes de irme, le tengo la palabra "siniestro", que es como los de los seguros le llaman a un accidente. Siniestro tiene el significado de algo funesto, malintencionado, pero también algo que está a mano izquierda. La idea antigua es que el lado izquierdo -de la mano, por ejemplo- siempre es menos efectivo comparado con el derecho y por eso la izquierda representa el lado que no tiene algo positivo.

Bueno, así se pensaba antes.

Soy Don Juan Recaredo… compártame sus dudas y comentarios. [email protected] X: @donjuanrecaredo.

ME PREGUNTA Fede Villarreal: ¿Cómo se dice cuando una persona ha sido muy fiel a otra? ¿Fielísima?

LE RESPONDO: El superlativo de la palabra fiel es "fidelísimo". Por ejemplo: "Esa persona ha sido fidelísima toda su vida".

LAS PALABRAS TIENEN LA PALABRA: Quien diga que el dinero no da la felicidad, pues que transfiera el suyo a mi cuenta.

Leer más de Columnas Social

Escrito en: Las palabras tienen la palabra Columnas

Comentar esta noticia -

Noticias relacionadas

Siglo Plus

+ Más leídas de Columnas Social

LECTURAS ANTERIORES

Fotografías más vistas

Videos más vistos semana

Clasificados

ID: 2381743

YouTube Facebook Twitter Instagram TikTok

elsiglo.mx