
Iglesia a retomar principios de la ley natural
Durante la misa dominical oficiada en el templo de Santiago Apóstol, Monseñor Néstor Martínez Sánchez, Vicario General de la Diócesis de Saltillo, exhortó a los fieles a volver a los principios esenciales de la ley natural, mismos que -dijo- fundamentan los Diez Mandamientos y, por extensión, todas las leyes humanas.
En su homilía, el vicario explicó que estos mandamientos no son imposiciones difíciles de cumplir, como muchos creen, sino directrices nacidas del principio más elemental de la moral humana: “hacer el bien y evitar el mal”. Subrayó que esta verdad puede ser descubierta por cualquier persona con un mínimo de racionalidad, ya que se trata de una regla básica de convivencia y justicia universal.
“Este principio básico no está destinado solamente a que lo aplique a mi vida sin mirar más allá”, enfatizó Monseñor Martínez. “Es un llamado para toda la humanidad. Si todos nos dejamos guiar por esta ley natural, lograremos mucho como sociedad”.
Advirtió contra el relativismo egoísta
El religioso hizo una crítica al estilo de vida moderno, donde muchas personas, según dijo, viven bajo un relativismo subjetivo que los lleva a actuar solo en función de su conveniencia. “Hoy en día, muchos dirigen su vida diciendo: ‘yo voy a hacer lo que a mí me gusta, lo que a mí me conviene’. Y eso nos aleja del bien común”, señaló.
Martínez Sánchez aseguró que este tipo de pensamiento egoísta impide que los valores fundamentales como la vida, la dignidad y el respeto florezcan en la sociedad. “No podemos quedarnos encerrados en lo que a mí me satisface, sino pensar en el bien de todos, en el respeto por la vida del otro”, sostuvo.
“La vida es un bien básico que debemos cuidar”
Uno de los valores que el vicario colocó en el centro de su reflexión fue la defensa de la vida. Recordó que, desde la perspectiva de la ley natural y también desde la fe, la vida es sagrada y debe protegerse siempre. “La vida es un bien valioso. Cualquier persona con sentido racional puede llegar a esta conclusión. Tu vida es valiosa, la vida del otro también lo es”, dijo.
Llamó a los asistentes a no participar en acciones que atenten contra la vida, ni la propia ni la de los demás. “Estamos dotados de inteligencia y racionalidad. Eso nos distingue como seres humanos, y es nuestra responsabilidad utilizar esa inteligencia para defender y preservar la vida en todo momento”, expresó.
Instó a volver al orden moral natural
Finalmente, Monseñor Néstor Martínez pidió a la comunidad católica vivir con más énfasis los principios básicos del orden natural y divino, en medio de un mundo —dijo— dominado por el egoísmo y el desapego moral. “Si todos actuamos desde este principio de hacer el bien y evitar el mal, podremos vivir conforme a la voluntad de Dios y en armonía con nuestros semejantes”, concluyó.
La reflexión fue recibida con atención por los feligreses, quienes participaron activamente en la celebración eucarística de este domingo, en un llamado a retomar los valores éticos fundamentales en la vida cotidiana.