En 2018, el Siglo de Torreón publicó el Diálogo "Fraking", que se dedicó a comentar a los coahuilenses sobre el intento del gobierno del estado interesado en gas. Escribíamos sobre el peligro potencial que representaba y dábamos datos sobre el proceso.
Le comparto parte del escrito, ante la noticia del interés que existe, ahora del gobierno federal, de autorizar la fractura del subsuelo para obtener el citado gas y dar a PEMEX más ingresos. Queda la duda del precio que vayamos a pagar todos los mexicanos, más allá de los dineros que pudiera recibir la paraestatal.
"El término fracking, anglosajón, es utilizado para referirse a la técnica de fracturación hidráulica para extraer gas no convencional. Consiste en introducir tubos al subsuelo o lo profundo del mar y con una "uña" escarbar hasta llegar entre cinco y siete mil metros de profundidad, donde se encuentran rocas de esquisto".
"Al llegar a tales profundidades, se vira a direcciones horizontales inyectando agua, arena y químicos a gran presión, fracturando las rocas y liberando el gas shale contenido en piedras de esquisto, pizarra o litita, siendo su extracción hasta un cien por ciento más barata que la técnica actual".
"Miriam Grustein, experta en el tema, consultora y catedrática de la UNAM, con Ángel de la Vega Navarro, también catedrático, advirtieron del posible daño ambiental que puede ocasionar por el abatimiento de mantos acuíferos - requiere consumos enormes de agua- y el riesgo contaminante por los químicos, cuyas fórmulas no son reveladas por las empresas explotadoras del shale". "La combinación de agua y químicos tiene consecuencias" -declaró de la Vega- "residuos cuyo manejo no está garantizado, lodos y agua contaminados y el problema para deshacerse de ellos, para reciclarlos o tratarlos y evitar daños al ambiente"; agregó: "hay el riesgo de que la presión sobre las rocas, en el proceso de "fracking", pueda provocar que los residuos contaminados de lodos y agua se filtren a los mantos freáticos". También dijo: "la filtración de metano en mantos acuíferos puede suceder si las empresas no toman las debidas precauciones al construir las paredes de cemento de los pozos".
Debo escribir que, al parecer, el consumo de agua, con las nuevas técnicas de extracción, ha sido reducido importantemente, igualmente, el avance en las medidas de seguridad que se adoptan -gracias a la experiencia en los años de aplicar la técnica- reduciendo el peligro de daño ecológico, que sin embargo persiste.
También vale la pena reconocer la calidad en preparación profesional de los técnicos expertos de PEMEX, que son reconocidos mundialmente. No así su administración y las políticas administrativas dominadas por el mal sindicalismo; baste recordar que requiere el doble de personal, en relación con otras petroleras del mundo, obteniendo los mismos o menores resultados.
"Las opiniones del mundo profesional son encontradas: en los Estados Unidos de Norteamérica, hay una postura favorecedora, aun estando conscientes de las fallas que se han presentado y los daños ecológicos ocasionados, caso de una pequeña población en Pensilvania, Milanville, donde llegaron a ver encenderse el agua de los grifos, por una filtración de metano".
En Europa continúan vetándolo y el informe emitido en junio de 2011, por la Comisión de Medio Ambiente, Salud Pública y Seguridad Alimentaria del Parlamento Europeo, concluye sobre la fracturación hidráulica que "puede producir emisión de contaminantes a la atmósfera, contaminación de las aguas subterráneas debido a caudales de fluidos o gases provocados por escapes o vertidos, fugas de líquidos de fracturación y descargas no controladas de aguas residuales".
En aquel año 2018, se denunciaban intereses particulares y de políticos que buscaban obtener los permisos para su extracción, mismas que finalmente no se dieron, con declaraciones prohibitivas y promesas del entonces presidente recién electo. Tampoco cumplió.
Víctor Rodríguez Padilla, director de PEMEX, refiere que en los gobiernos de Peña Nieto y Calderón, se hicieron perforaciones de estudio y análisis y que fueron satisfactorios, por lo que: "Posteriormente, y tras obtener las autorizaciones respectivas, a finales de ese año se dará inicio, de manera secuencial, a las pruebas de concepto y programas".
Por su parte, la presidente Claudia Sheinbaum, aclara el interés de su gobierno por explotar el recurso que, particularmente se encuentra en Coahuila y Tamaulipas, junto a algunos yacimientos en el sur este mexicano.
La experiencia que nos ha dejado los últimos gobiernos a cargo de MORENA, nos ha hecho dudar sobre la profesionalidad y seguridad en sus actuaciones, aunque también debemos considerar la necesidad económica, de una paraestatal en quiebra inminente -a pesar del anunciado nuevo plan de rescate- y, ante todo, la opacidad y profundización de la corrupción.
Es interesante que aún no se mencione a esos "empresarios interesados" y ello genera expectativas de positivas a negativas. Deberemos estar pendientes del avance del caso. ¿Usted qué opina?