Los mexicanos y en especial los partidos y grupos de oposición deberán reconocer que el gobierno de Morena consumó la reforma judicial con todos los excesos legales y políticos que podamos imaginar y que a estas alturas resulta prácticamente imposible revertirla, cuando menos en el corto plazo.
La estocada final en esta farsa electoral que planeó Andrés López Obrador y que con fidelidad ciega fue secundada por sus títeres, fue el controvertido acordeón que a nuestro juicio fue una astuta vagancia política al estilo de los tiempos del PRI-gobierno.
Haya o no incurrido en ilegalidades, lo cierto es que el acordeón electoral fue la clave para que Morena impusiera con acierto a los hombres y mujeres que fueron escogidos para ocupar los distintos cargos en juego del poder judicial a nivel federal y estatal.
Nos recuerda la época dorada del priismo cuando los viejos gánsteres de la alquimia electoral rellenaban urnas con los votos necesarios para ganar cualquier elección.
También cuando de la manga surgían acusaciones bien orquestadas para descalificar a algún candidato de oposición que había agarrado fuerza popular y que amenazaba con desbancar a algún priista de abolengo.
En otras palabras, Morena está operando con los viejos trucos electorales del pasado ante el aturdimiento de la oposición que solo ve pasar los balones rumbo a su portería sin tan siquiera meter las manos.
Aquí se comprueba que "chango viejo no aprende maroma nueva", es decir se repiten la mañas del pasado, sin embargo hay que reconocer que varios de estos changos veteranos han sabido darle su manita de gato a las antiguas maromas.
La estrategia de los partidos de oposición ha sido un verdadero desastre desde el candidato presidencial López Obrador ganó la elección por amplio margen en el 2018, desde entonces el país ha cantado y bailado al son que toca Morena.
Hoy los miembros de la oposición lloran y se tiran al suelo para lamentar los abusos del partido en el poder, exactamente como los rivales del pasado actuaban cuando el PRI ganaba de todas, todas, sin que nadie pudiera objetarlo.
¿Qué tendrían que hacer los partidos de oposición para frenar esta locomotora llamada Morena que amenaza con llevar al país al desfiladero tal como lo han hecho los gobiernos totalitarios de Venezuela, Cuba y Nicaragua?
La verdad es complicado saberlo, lo único cierto hasta el momento es que tanto el PRI-PAN como Movimiento Ciudadano siguen sin despertar porque sus planes no han funcionado en los últimos años.
¿O acaso no es un rotundo fracaso perder el año pasado tanto la mayoría simple como la mayoría calificada de las cámaras de diputados y de senadores? ¿Se puede hablar de que la oposición es un contrapeso real del sistema cuando Morena y sus huestes acaban de tomar el control del Poder Judicial en una jugada casi perfecta de tres bandas?
Habría que voltear al extranjero para observar cómo se mueven las piezas e intentar adoptar algunas ideas y acciones.
En Argentina un político de derecha extrema con cierto grado de chifladura logró vencer al peronismo socializante que llevó a ese país a la quiebra económica y al a un rezago social histórico.
En Italia una mujer de ideas conservadoras extremas convenció a los electores de emprender un nuevo modelo económico para superar los estragos causados por los socialistas demócratas.
En Estados Unidos la derecha recupera el poder gracias al liderazgo de un hombre que con sus desplantes y agresividad logró reunir los votos suficientes para desbancar a los demócratas que gastan y gastan sin gobernar eficientemente.
El éxito en estos casos todavía está por verse, podrían incluso fracasar de manera estrepitosa, pero al menos lograron poner un freno a gobiernos populistas de izquierda como el de Morena que no sabemos a dónde llevarán a México.
Muchas más ideas tendrán que analizarse para impedir que se instaure una nueva dictadura de partido, lo cierto es que no podemos quedarnos con los brazos cruzados cuando hace unos años nuestro país se enfilaba a una democracia estable con la posibilidad de crecer su economía a niveles de los países desarrollados.
NOTICIAS, NOTICIAS…
Por ahora prevaleció la cordura en Donald Trump al postergar un ataque aéreo en contra de Irán lo que habría complicado seriamente el entorno internacional. El inicio de un conflicto armado entre Estados Unidos y el gobierno fanático iraní pondría al mundo al borde de la tercera guerra mundial que a nadie conviene en estos momentos.
