
BM alerta sobre riesgos por uso de celulares para pagos digitales
Actualmente el 86% de los adultos en todo el mundo posee un teléfono móvil, incluido el 68% de los adultos dueños de un dispositivo inteligente, según el reporte Rastreador de la conectividad digital 2025 del Banco Mundial (BM) y de Global Findex.
Sin embargo, el mayor uso de los teléfonos móviles para realizar transacciones digitales conlleva nuevos riesgos, alertó.
Lo anterior es debido a que los datos de los y las usuarias pueden verse vulnerables ante malware o phishing, así también se incluye el incremento de la posibilidad de fraude, como skimming o ataques de retransmisión.
Refirió que en las economías de ingreso bajo y mediano, de los 4 mil millones de adultos que poseen un teléfono móvil, únicamente alrededor de la mitad utiliza una contraseña para proteger su dispositivo.
Destacó que en todos los países en desarrollo, cada vez son más los adultos que utilizan teléfonos móviles o tarjetas para pagar.
La información más reciente de 2024, indica que 42% de los adultos de los países de ingreso bajo y mediano efectuó un pago digital en una tienda o en línea, frente al 35% en 2021.
Según el reporte, 75% de los adultos que reciben pagos del Gobierno —y la mitad de los asalariados— tienen su dinero en una cuenta, lo que para el organismo es una práctica que ayuda a reducir los robos y garantizar que el dinero llegue a la persona adecuada.
Muestra que el 80% de los adultos de todo el mundo tiene ahora una cuenta financiera, en comparación con el 50% en 2011.
No obstante se pone de manifiesto que aún hay mil 300 millones de adultos que no tienen acceso a servicios financieros.
Para el BM los teléfonos móviles podrían ayudar a cerrar esta brecha: alrededor de 900 millones de personas adultas sin cuentas financieras tienen un teléfono móvil, incluidos 530 millones que poseen teléfonos inteligentes.
Al respecto, el presidente del Grupo del Banco Mundial, Ajay Banga, destacó que "la inclusión financiera tiene el potencial de mejorar vidas y transformar economías enteras".
Dijo que "las finanzas digitales pueden convertir este potencial en realidad, pero se necesitan varios elementos".
Mencionó que el grupo del BM ayuda a los países "a que den acceso a la población a documentos de identidad digitales nuevos o mejorados. Estamos creando programas de protección social con sistemas digitales de transferencias monetarias que entregan los recursos directamente a las personas que los necesitan.
Estamos modernizando los sistemas de pagos y ayudando a eliminar los obstáculos regulatorios, de modo que las personas y las empresas cuenten con el financiamiento que requieren para innovar y crear empleos".