
¡Acércalos a la lectura!
La lectura es vista como una actividad de múltiples virtudes, como la de aumentar el vocabulario, estimular la imaginación o el pensamiento crítico. Pero, más allá de los aprendizajes que pueda traer, la lectura es vista también como una puerta a ser feliz, que alimenta la curiosidad. Esa es la razón que llevó a la periodista argentina María Luján Picabea a escribir el Literatura para la infancia, un libro que ofrece claves para acercar a los más pequeños a la lectura.
Los formatos
La narrativa es una de las formas de lectura lúdica más reconocidas. Luján recomienda, en este aspecto, explorar las distintas formas en que se transmiten las historias. Aquí, se refiere a que los niños pueden acercarse a ellas en formatos más amigables, como libros-album, ilustrados, clásicos adaptados, libros digitales interactivos, historietas o hasta narraciones orales.
Sobre el didactismo
La lectura puede tener muchos usos. Uno es el aprendizaje, y otro es la diversión. Pueden ir juntas, pero no necesariamente. La autora hace énfasis en la lectura como una actividad lúdica, más allá de las enseñanzas que pueda dar, por lo menos de manera inmediata. Esto permite que no se asocie solamente al libro con una lección o extensión de una tarea, sino como una actividad disfrutable.
Los derechos del lector
Otro escritor que se ha dedicado a reflexionar sobre la lectura, en todas las edades, es el francés Daniel Pennac, conocido especialmente por el libro Como una novela. Pennac es ampliamente reconocido por enunciar en su texto los “derechos del lector”.
Lejos de la imposición, estos derechos están enfocados en la libertad que debe tener una persona en su relación con los libros, y son aplicables a los más pequeños: derecho a no leer, a saltarse páginas, a no terminar un libro, a releer, a leer lo que se quiera, a leer en donde quiera, a identifcarse con los personajes, a hojear un volumen, a leer en voz alta y a no opinar sobre lo que se ha leído.

VER MÁS ¿Cuál es la ingeniería más difícil de estudiar?
Sus altos requerimientos en matemáticas, física y conocimientos técnicos la posicionan en el primer puesto de las ingenierías más complejas.