Malbéne publicó un artículo en la revista Lumen que de seguro resultará polémico.
En él habla de la naturaleza, “esa tarjeta de presentación de Dios”, y dice que desobedecerla es desobedecer a su creador.
Escribe: “Mis libros sagrados son la montaña, el bosque, el mar.
Y otros libros sagrados tengo: los que escribieron Dante, Shakespeare, Cervantes, Goethe, Dickens, Tolstoi, Flaubert y otros como ellos.
Su lectura me inclina al bien más que cualquier sermón”.
Las opiniones de Malbéne hacen que sus críticos lo califiquen de dogmático.
“Lo soy -admite él-. Tengo por dogma combatir los dogmas de quienes siembran temor en vez de sembrar amor”.
Hace unos días el asistente a una de sus conferencias le dijo: “Lo admiro, maestro, pero a veces no lo entiendo”.
“Es explicable -respondió Malbéne-. En ocasiones ni yo mismo me entiendo”.
¡Hasta mañana!...
