Retomando la historia o lo que pareciera el curso natural de la política mexicana desde el siglo XX, tal parece que si en algo podemos identificar una constante o tendencia no es en cuanto a sus muy contados aciertos sino en lo que toca a sus vicios; vicios que parecieran endémicos y consubstanciales por cuanto los vemos repetirse-cambiando de nombre y de rostro-de manera cíclica, como si se tratara incluso de una especie de maldición o de herencia; haciéndose presentes cuando menos deberían de esperarse.
Sin duda, uno de los mayores símbolos de corrupción y nepotismo fue el hermano del ex presidente Carlos Salinas de Gortari: Raúl Salinas de Gortari, hermano mayor que recibiera el sobrenombre de "el hermano incómodo" luego que la revista Proceso publicó el recuento de tráfico de influencias, negocios ilícitos, enriquecimiento inexplicable y derroches del mismo, refiriendo como desde el gobierno de Miguel de la Madrid, Raúl fue Gerente general de Sistema de Distribuidoras deConasupo (Diconsa), donde tras el accidente nuclear de Chernobyl, que en aquel entonces se encontraba bajo el control de la Unión Soviética, ordenó la compra masiva a bajo precio de leche contaminada que provenía de una bodega en las inmediaciones de la planta radiactiva, en el año de 1986.
La leche llegó a nuestro país y hubo varias protestas por contaminación de dicho alimento, pues según estudios generó cáncer en algunos niños que la consumieron. Pero Raúl no fue debidamente procesado por esta responsabilidad criminal siquiera sino por capricho presidencial de Ernesto Zedillo, quien le fincó acusación como supuesto autor intelectual del asesinato de José Francisco Ruíz Massieu.
Más recientemente, como repetición de lo peor del pasado, surge un nuevo hermano incómodo este sexenio nada menos que en la persona de Pío López Obrador quien trascendió a la luz pública y en varios videos por recibir enormes sobres amarillos con dinero ilícito para financiar la campaña de su hermano en el poder.
El periodista Carlos Loret de Mola y Pío López, sostuvieron un careo judicial el martes 27 de febrero debido una demanda interpuesta por este último contra el comunicador al igual que contra la empresa Latinus-como medio de comunicación-a quienes exigía desde lo más absurdo la cantidad de 200 millones de pesos de indemnización por "daño moral" tras ser expuesto en 2020, recibiendo dinero del funcionario federal David León Romero.
Tras salir de la audiencia formal en el Juzgado LXII de la Ciudad de México,Loret fue entrevistado por varios medios de comunicación a los que les refirió que el nuevo hermano incómodo:"No pudo desmentir un solo renglón de nuestro reportaje…Terminó aceptando que los videos son auténticos", agregando un detalle bastante revelador: "Me llamó la atención que, al final de audiencia, el señor David León expresó que el señor Pío López Obrador lo había amenazado, que le había dicho que se cuidara, que cuidara a su familia".
Por su parte y después de esta entrevista, el Diario Reforma aseguró que Pío López se negó a brindar ningún tipo de declaraciones para los medios, tras salir del careo con el periodista, alegando que no podía violar una medida cautelar sobre la revelación de información.
Para nadie es un secreto que en lo que toca a este Gobierno Federal que ya se va, el orgullo del nepotismo ha sido una constante presidencial que se repite; ya sea en la persona de los tres hijos mayores de López-evidenciados por tráfico de influencias y corrupción-o en la persona de Felipa Obrador, la prima beneficiada con contratos multimillonarios por asignación directa de parte de PEMEX.
No deja de ser chocante todo esto cuando proviene justamente de parte de quienes durante décadas, presumiendo una "superioridad moral" que nunca tuvieron, repiten hasta el cansancio que no son como los anteriores cuando resultaron siendo peor que todos juntos.
