
Desconocimiento constitucional lleva a la ciudadanía a apoyar la reforma judicial
Humberto Muñoz, Coordinador de Magistrados del Poder Judicial Federal en Coahuila, señaló que las protestas y paros que se llevan a cabo en todo el país en rechazo a la reforma judicial promovida por el Presidente Andrés Manuel López Obrador y el partido Morena, son una respuesta necesaria ante lo que considera un ataque directo a la independencia judicial y al equilibrio de poderes en México.
"Esta protesta es nuestra forma de manifestarnos para que la gente entienda lo que está en juego", afirmó Muñoz, quien subrayó que la ciudadanía desconoce en gran medida el contenido de la Constitución y el papel fundamental que desempeña el Poder Judicial.
Este desconocimiento, dijo, es precisamente lo que el Gobierno y el partido en el poder están explotando para ganar apoyo en su intento de modificar el organismo judicial.
Muñoz advirtió que la situación actual es extremadamente delicada: "Si nos quedamos callados, de todas maneras, va a pasar la reforma", dijo, dejando claro que, aunque el panorama es sombrío, los magistrados y jueces tienen la obligación de defender el derecho de los mexicanos a una justicia imparcial.
"Mínimo debemos tener la dignidad de salir a defender los derechos de los ciudadanos", agregó, subrayando que la función del Poder Judicial no es política, sino garantizar el respeto a la ley y los derechos de todos.
El Coordinador explicó que la campaña de denostación que sufren los jueces y magistrados tiene como objetivo debilitar al Poder Judicial, el cual ha sido un contrapeso clave frente a los otros poderes del Estado.
"Nosotros servimos para que el pueblo de México tenga el derecho a ser respetado por los otros poderes", afirmó; además, destacó que la calidad del trabajo que realiza el Poder Judicial es precisamente la razón por la cual se busca su debilitamiento y eventual desaparición.
Muñoz expresó su preocupación por las consecuencias que esta reforma podría tener para el país: "Las consecuencias negativas que pagarán los mexicanos se verán reflejadas muy pronto", advirtió, señalando que la reducción del número de jueces y los cambios a la Constitución que podrían implementarse en el próximo sexenio llevarán a un punto de no retorno.
"Cambiando la Constitución no hay vuelta atrás, seremos un Venezuela", sentenció, haciendo referencia al peligro de que se desmantelen las instituciones democráticas.
Una de las críticas más frecuentes que enfrentan los magistrados es la percepción de que están defendiendo sus sueldos y privilegios, pero Muñoz refutó estas acusaciones de manera contundente: "No estamos defendiendo nuestros sueldos; estamos defendiendo la libertad, la educación, las propiedades de los mexicanos", afirmó, explicando que el trabajo del Poder Judicial es intervenir en casos de abuso de poder, protegiendo a los ciudadanos contra actos arbitrarios del Estado.
Muñoz también destacó la importancia de una justicia imparcial en casos concretos, como cuando se embarga indebidamente una cuenta bancaria y los jueces conceden un amparo para proteger los derechos del afectado: ”Si uno le debe a alguien la candidatura, el día que levante el teléfono tiene que contestar a quien votó por él", dijo, advirtiendo sobre los peligros de un Poder Judicial subordinado al poder político.
Finalmente, el Magistrado lamentó que la población, en muchos casos, no se tome la molestia de entender el trabajo que realiza el Poder Judicial, ya que están ocupados con sus propios problemas e intereses: "Los milagros existen, pero no de forma legal", reflexionó, sugiriendo que, si la situación no se corrige, el daño a la Constitución será irreversible.