Fueron alrededor de 25 trabajadores de la planta dos de Altos Hornos de México los que acudieron a la capilla.
El Sindicato Nacional Minero se desmarcó de los hechos vandálicos en los que un grupo de trabajadores de Altos Hornos de México realizó destrozos en la capilla funeraria propiedad de la Sección 288 del Sindicato Democrático.
Acusan, sin embargo, a la sección local 288 de malos manejos y responsabilizan al gobernador por permitir que el gremio continuara con la operación de la empresa fúnebre.
Los trabajadores pertenecientes al Grupo Transparente de la Sección 288, afines al Sindicato Nacional Minero, se deslindaron “de cualquier hecho vandálico o estallido social que altere la paz y vulnere y afecte la propiedad y el patrimonio de los propios trabajadores”.
Armando Rentería, sindicalista activo y simpatizante del Sindicato Minero, sostuvo que los rijosos actuaron de ese modo porque el secretario general de la sección sindical no les ha dado la cara.
Dijo que acudieron a buscarlo en tres ocasiones el mismo día, pero no lo encontraron y los ánimos se encendieron y causaron los destrozos al inmueble.
Sostuvo que no se trata de la pugna entre los sindicatos Democrático y Minero, sino de los trabajadores que exigen resultados al comité ejecutivo local que encabeza Ríos, ante la falta de pagos de AHMSA a sus trabajadores.
Rentería manifestó que fueron alrededor de 25 trabajadores de la planta dos de Altos Hornos de México los que acudieron a la capilla, con un arrebato de desesperación en el que causaron los estragos.