FOTOS: Enrique Castruita
La sucursal de la tienda Cimaco, ubicada al interior de Plaza 4 Caminos en Torreón, dedicó su altar de muertos al reconocido pintor colombiano Fernando Botero, quien falleció en Mónaco el pasado 15 de septiembre a la edad de 91 años.
El altar está decorado con el tradicional papel picado color rosa, flores de cempasúchil y una gran calavera hecha con flores de papel. Se puede apreciar la figura de un perro como guía de los espíritus y las típicas calaveritas de azúcar.
También se aprecian un par de pequeñas reproducciones a escala de obras de Botero como Monalisa (1978) y La Familia (1972), cuyos originales se exhiben en el Museo Botero, en Bogotá, Colombia.
En la parte superior, el altar es coronado por una fotografía en blanco y negro del maestro colombiano con la leyenda “Fernando Botero 1932-2023”.
Botero es autor de alrededor de 300 esculturas y tres mil pinturas marcadas con su inconfundible estilo donde el volumen es protagonista.
Cabe recordar que la obra de Fernando Botero visitó la Comarca Lagunera en agosto de 2013, gracias a la exposición itinerante “Botero 80 años. Testimonios de la barbarie” que se instaló en el Museo Arocena. Sergio Garza Orellana, curador de este recinto, indicó que se trató de una colaboración con el Museo Nacional de Colombia y el Gobierno del Estado de Coahuila.
Tras su muerte, Botero recibió funerales en Bogotá y Medellín, para finalmente ser sepultado en el cementerio de Pietrasanta, Italia, donde también descansa su esposa Sophia Vari, fallecida en mayo de este año.
