Columnas Social

Columna

Vibremos Positivo

Perspectiva

CLAUDIO PENSO

Van Gogh padecía psicosis aguda, locura mística y epilepsia congénita. Estuvo internado en Saint Rémy. Allí le realizaban prácticas antropométricas (comunes en la época) basadas en mediciones del cráneo para detectar patologías a partir de rasgos somáticos.

Una mañana ingirió varios pomos de pintura para envenenarse, luego de una desilusión amorosa.

Cierto día, luego de una disputa con el pintor Gauguin, se cortó un lóbulo de su oreja para disculparse.

A los 37 años, en la más absoluta soledad y pobreza, se pegó un tiro y murió luego de 2 días de agonía.

¿Cómo le fue a Vincent Van Gogh comercialmente mientras vivió?

Bastante mal. Incluso, la tumba en la ciudad de Arles está al lado de su eterno protector: Theo Van Gogh, su hermano.

En toda su vida sólo logró vender un solo cuadro.

Claro que no podríamos etiquetar a Vincent como un fracasado. Cualquier coleccionista de arte estaría dispuesto a librar casi un cheque en blanco por una obra de este artista un siglo después.

Hace poco tiempo, se pagaron 231 millones de dólares por 4 obras (Girasoles, Lirios, Autorretrato y Retrato del doctor Gachet).

Cualquier juicio sobre la calidad y el valor de este artista depende de la perspectiva con la que se juzgue.

¿No tenía valor antes? ¿Lo tiene ahora?

La mayoría de las obras, los hechos y la vida misma cambian su perspectiva con el tiempo.

El 29 de octubre de 1929 será recordado por la historia como el "martes negro". Desaparecieron unos 10 mil millones de dólares, el equivalente de 100 mil millones actuales. Muchas personas se enriquecieron apostando a la bolsa en un juego peligroso que estalló por los aires. El gobierno intervino subiendo las tasas pero ya era tarde, había cundido el pánico y los inversores pugnaban por liquidar sus títulos. Todos sucumbieron a una ola de quiebras y cierres que culminó con suicidios, pobreza y depresión.

Esa crisis se repitió muchas veces en otros países. Nadie aprendió de ellas. Simplemente los hechos dramáticos se re significaron y con el paso del tiempo cambiaron su perspectiva.

Lo que hoy nos parece oscuro, quizá dentro de un período será una simple anécdota.

Como le ocurrió al genio francés, mientras el artista estuvo creando su obra, vivió atormentado, en ostracismo, rodeado de indiferencia. Cien años después, el mundo entero lo admira y le rinde tributo.

Ninguna de nuestras experiencias será tan trágica dentro de un tiempo, ninguno de nuestros dolores será tan intenso. El tiempo congela, anestesia y restaña cada una de las heridas.

Te invitamos a seguir nuestras redes sociales en Facebook como vibremospositivo, en instagram como @jorge_lpz, @vibremos_positivo2020 y @claudiopenso, escríbenos a [email protected]

Leer más de Columnas Social

Escrito en: Vibremos positivo nosotros Columna

Noticias relacionadas

Siglo Plus

+ Más leídas de Columnas Social

TE PUEDE INTERESAR

LECTURAS ANTERIORES

Fotografías más vistas

Videos más vistos semana

Clasificados

ID: 2087757

YouTube Facebook Twitter Instagram TikTok

elsiglo.mx