Cultura

Thomas Hillerkuss

Thomas Hillerkuss y la herencia de los judíos conversos en Nueva España

Fueron obligados a elegir entre el bautismo católico o el exilio

(FERNANDO COMPEÁN)

(FERNANDO COMPEÁN)

SAÚL RODRÍGUEZ

El doctor Thomas Hillerkuss tomó carretera desde Zacatecas, lo abordó la lluvia y llegó a Torreón para impartir una conferencia sobre los judíos conversos en la Nueva España durante el siglo XVI, esto en las instalaciones del Archivo Municipal Eduardo Guerra. El también investigador de la Universidad Autónoma de Zacatecas (UAZ) habló sobre casos de Jalisco, el Bajío, la región central de México y el desenvolvimiento social que tuvieron estos judíos en la Nueva España.

Antes de tomar el micrófono, Hillerkuss conversó con El Siglo de Torreón y compartió a la grabadora sus conocimientos sobre el tema. La primera referencia que se tiene sobre la presencia de los judíos conversos en la Nueva España data de 1526. En España se habían instaurado las órdenes de la Inquisición y para 1519 ya había casos de judíos que se habían convertido al cristianismo.

La Cédula Real de Barcelona, fechada el 16 de julio de 1519 y resguardada en el Archivo General de Indias, en Sevilla. Allí se indica la prohibición a judíos, conversos y protestantes, así como a sus descendientes de dos generaciones, para que viajaran al Nuevo Mundo. No obstante, muchos burlaron esta ley y subieron a los barcos.

Si bien los reyes católicos ya habían fallecido, la unificación que habían hecho con los reinos de España no se disolvió. “Tras la muerte de Isabel I (en 1504), Fernando II se retiró a sus tierras en Aragón y dejó gobernar a regentes, que en muchas ocasiones eran arzobispos, cardenales, hasta que entró su hijo Carlos I, quien después tampoco estuvo tanto presente, porque tenía sus guerras en Europa Central contra los protestantes”.

Fue hasta la llegada de Felipe II al poder, que el absolutismo gobernó en España y sus colonias durante la segunda mitad del siglo XVI. La conferencia ofrecida doctor Thomas Hillerkuss se ancla justo en esta época.

“Los judíos, con su salida de Tierra Santa, de su tierra prometida, se esparcieron por todo el mundo. Cuando a los cristianos les convenía decían: ‘Ellos son los culpables por la muerte de Jesús’, y entonces los empezaban a perseguir. Pero en realidad, la causa era económica, porque los judíos andaban en oficios libres al negarles los oficios tradicionales (no podían aprender a ser carpintero, albañil o herrero). Así andaban en el comercio, también eran prestamistas y se hicieron ricos”.

Hillerkuss indica que el papel de los judíos en la economía era importante. No obstante, su persecución comenzó en el siglo XIV. Los reyes católicos consideraban a los judíos como de su propiedad, pero al mismo tiempo promulgaron el Edicto de Granada de 1492, el cual obligaba a los judíos en España a elegir entre el bautismo católico o el exilio. Al investigador le llama la atención esta contradicción, pues una de las causas del ocaso económico español fue el haber exiliado a los judíos.

El investigador indica que una publicación capaz de ahondar en este tema son los siete tomos Los conversos y la inquisición sevillana (Universidad de Sevilla, 2000) del profesor Juan Gil, donde se puede identificar cuáles familias en México son descendientes de sevillanos.

“Donde busco, casi en la mitad de los casos, detecto antepasados, porque los judíos tenían una presencia importante en España, manejaban gran parte de la economía y cuando los corrieron, España entró en crisis. Y España, con todos los tesoros e impuestos que sacó de América, se quedó en la quiebra total porque perdió a aquellos que sabían manejar la economía, porque en ello no sólo entraban los judíos, sino también los musulmanes”.

En Nueva España, los judíos conversos se distribuyeron por distintos puntos del territorio. Quizá el caso más famoso es el de Monterrey, cuya cultura aún muestra rasgos de esta herencia en su habla y gastronomía.

“No me interesa tanto la religión, sino la vida social: ¿Cómo se fueron acercando? ¿Cómo podían desenvolverse aquí, bajo la amenaza? ¿Cómo la Corona española los acaba? Realmente, hay que decir, la Inquisición, en la persecución en contra de ellos, fue mínima. Dijeron: ‘Si no se portan mal, pueden hacer casi todo aquí’”.

No obstante, Hillerkuss hace un comentario sobre la familia Carvajal, a cuyos miembros se le atribuye la fundación de Monterrey. El investigador aclara que ellos cometieron un error, pues si bien la mitad de sus integrantes eran conversos, la otra eran practicantes. Su error fue no integrarse al círculo de los comerciantes establecidos. Se apartaron, fueron exitosos y la única manera de eliminarlos como competencia fue acusarlos de judaizar. El historiador aclara que en México, 52 judíos fueron quemados en los 250 años que duró la Inquisición.

Leer más de Cultura

Escrito en: Thomas Hillerkuss Judíos en Nueva España

Noticias relacionadas

Siglo Plus

+ Más leídas de Cultura

TE PUEDE INTERESAR

LECTURAS ANTERIORES

Fotografías más vistas

Videos más vistos semana

(FERNANDO COMPEÁN)

Clasificados

ID: 2117401

YouTube Facebook Twitter Instagram TikTok

elsiglo.mx