De los grandes jugadores de todos los tiempos surgidos de la cantera lagunera recordaremos hoy a Roberto "El Pichirilo'' Rodríguez, quien formó una gran dupla con el inolvidable Elías "La Chuleta'' Aguilar junior en el desaparecido equipo Torreón que logró el ascenso a Primera División en la temporada 1968-1969, en la cual los Diablos Blancos fueron Campeones de Liga, Copa y Campeón de Campeones.
Roberto Rodríguez Moreno, su nombre completo, nació el diez de marzo de 1944 en Torreón, Coahuila. De condición humilde, según lo contado por Pedro "El Perón'' Guerrero, vivió en una vecindad ubicada por avenida Seis de Octubre entre calles Ocho y Nueve, cercana a la Placita Madero, en donde empezó a jugar futbol desde pequeño.
En seguida recordó: "Jugaba descalzo. Tenía una inteligencia natural para jugar al futbol, una picardía poco común en esa época, con la cual compensaba la faltaba de físico. Era muy técnico, habilidoso, tenía mucha fuerza en ambas piernas. Ejecutaba muy bien los tiros de castigo y los penaltis. Esteban "El Cachuchas'' Méndez y yo lo protegíamos mucho, nosotros lo llevamos al Campesinos Cataluña''.
Cabe consignar que de la Placita Madero surgieron al profesionalismo Pedro "El Perón'' Guerrero, Esteban "El Cachuchas'' Méndez, José Luis "El Balín'' Picaso, Alfredo "El Gato'' Cervantes, José Mercedes Rojas, Valentín Guerrero, Humberto "Tocho'' Vega y Juan Manuel "El Membrillo'' Cuéllar, entre otros.
Su primer equipo fue Pericos de San Julián y después El Alborada, patrocinado por la maestra Aurora Antuna de Isáis, directora de un kinder que se llamaba así. Fue entonces cuando conoció a Elías "La Chuleta'' Aguilar y empezaron a jugar juntos, formando una excelente mancuerna que los llevó hasta convertirse en jugadores profesionales en los inicios de los años sesentas.
En una entrevista de hace años, Elías "La Chuleta'' Aguilar (QEPD) lo recordó así: "Roberto "El Pichirilo'' Rodríguez fue un habilidoso extremo derecho, con un dribling extraordinario y un excelente toque de balón, mandaba centros "como enviados con la mano'', que yo aprovechaba para convertirlos en gol y darle triunfos importantes al equipo Torreón''.
Agregó: "Su entendimiento conmigo provenía desde que jugábamos juntos en el equipo Alborada que dirigía mi papá, Elías Aguilar Rodríguez''. Jugaron juntos más de una década. "El Pichirilo'' Rodríguez conocía muy bien los movimientos de "La Chuleta'' Aguilar y le enviaba el pase al hueco, en donde Elías aparecía puntualmente para finiquitar la jugada.
El primero de ellos dos en debutar en Segunda División fue "El Picihirilo'' Rodríguez, lo hizo en el Campesinos Cataluña en la temporada 1961-1962, entre sus compañeros de equipo de aquel entonces podemos mencionar a Jesús "El Negro'' Ramírez, Tomás "El Ronco'' Ramírez, Juan Romero, Luis "Chuby'' Echeverría, Cipriano "La Tabla'' Cordero, Salvador Hernández, Rubén "La Pituka'' Escárzaga, Roberto "La Gringa'' Vega, Martín Ibarreche y Rodolfo Martínez, entre otros.
Elías "La Chuleta'' Aguilar debutó en la temporada 1962-1963 con el mismo equipo, pero cuando ya se llamaba Torreón - Cataluña, posteriormente les tocó la transformación a Diablos Blancos de Torreón, cuando el empresario Juan Abusaid Ríos, asumió la presidencia de este equipo.
En la temporada 1967-1968 Elías "La Chuleta'' Aguilar junior fue contratado por el equipo León de Primera División, dirigido en ese entonces por el técnico argentino Luis Grill, a quien le comentó a su llegada a los Esmeraldas que en los Diablos Blancos de Torreón había un jugador mejor que él y estaba libre, se refería a Roberto "El Pichirilo'' Rodríguez, quien también fue contratado y días después estaba entrenando con los Panzas Verdes.
"La Chuleta'' Aguilar junior debutó con el León en un partido contra el equipo Palestino de Chile, habiendo ganado los Esmeraldas por la mínima diferencia con gol de Elías; "El Pichirilo'' Rodríguez hizo su presentación con los Panzas Verdes en un partido contra el Atlas, habiendo ganado los del Bajío por 3-1 y se hizo presente en el marcador.
Los compañeros de Elías y Roberto en el León fueron los guardametas "El Tongolele'' Muñoz y "El Cuñis'' Gallardo, los hermanos Gil y Efraín Loza, Montalvo, Santillán, Gabriel Mata, Roberto "El Pachuco'' López, Sergio "El Xelaju'' Anaya, Amador "La Pájara'' Fuentes y Luis "El Chino'' Estrada. El conjunto Esmeralda en ese entonces estaba conformado por puros jugadores mexicanos.
A la siguiente temporada, 1968-1969, Elías "La Chuleta'' Aguilar y "El Pichirilo'' Rodríguez regresaron a los Diablos Bancos de Torreón para sumar esfuerzos en la lucha por el ansiado ascenso a Primera División, el cual consiguieron de manera matemática el domingo 26 de enero de 1969 al empatar a tres goles con Zacatepec en el Estadio Agustín "Coruco'' Díaz con tantos de Raúl Ramos Ruiz, Jesús Puentes y un golazo de Elías "La Chuleta'' Aguilar.
En 1970 Roberto Rodríguez Moreno se retiró a la vida privada, mientras que Elías Aguilar junior continuó una temporada más con los Diablos Blancos. En el torneo 1972-1973 "La Chuleta'' emigró al desaparecido equipo Ciudad Madero y concluyó su carrera a mediados de los setentas con el Tampico, logrando también ser un ídolo de la afición tamaulipeca.
Al retiro Roberto "El Pichirilo'' Rodríguez se dedicó a enseñar futbol en el barrio de Seis de Octubre y Calle 17, y atendía un pequeño negocio dedicado a la reparación de balones, oficio que aprendió de los hermanos Atilano y Francisco Valdés. Finalmente falleció la noche del 12 de marzo de 2013 a la edad de 69 años recién cumplidos. Su cuerpo fue velado en una funeraria local y quedó sepultado en el Cementerio Jardines del Tiempo de esta ciudad.
Su inseparable compañero, Elías "La Chuleta'' Aguilar, murió la madrugada del lunes 28 de diciembre de 2020 a la edad de 77 años en su domicilio particular de la colonia Ampliación Los Ángeles. Desde tres años antes padecía Alzheimer, su salud se fue deteriorando y finalmente sucumbió ante esta letal enfermedad.
La "Mancuerna infernal'' de Roberto "El Pichirilo'' Rodríguez y Elías "La Chuleta'' Aguilar vivirá por siempre en el recuerdo y cariño de los aficionados de antaño.
¡Hasta el próximo miércoles!