Malbéne, el controvertido teólogo lovaniense, tiene sus pintas de heterodoxo. Él mismo lo reconoce. Dice: "La heterodoxia es más interesante que la ortodoxia".
En una reciente entrevista para el Canal Verdad y Vida, de Luxemburgo, el entrevistador le preguntó si creía en el demonio.
-Sobradas razones tengo para creer en él -respondió Malbéne-, pero mi lógica personal me lleva a dudar de su existencia. El amor de Dios es infinito, y alcanza a todas las criaturas. Dios no puede amar al demonio, que es el mal. La disyuntiva, entonces, sería ésta: o el demonio no existe o el amor de Dios no es infinito.
Las sutilezas de Malbéne ponen escándalo en algunos de sus colegas.
-Qué bueno que se escandalicen -declara él-. Así se quitan algo de su aburrimiento.
¡Hasta mañana!...