Cuando te cargas una buena resaca, hay varias reglas fáciles que puedes seguir para evitar, ahora sí, que se recrudezca la situación. La primera (sobre todo si tienes pareja) es evitar (por el motivo que sea) la discusión, debate o polémica, es fundamental mantener una placidez seráfica, asentir con vergonzosa obediencia a todo, mantener la mirada baja y suplicante, de ahí el ancestral adagio bajado de las cumbres del Himalaya: "No hay crudo que no sea humilde".
Otra recomendación obvia, es evitar el ruido y sonidos estridentes, mentarle la madre al pin... perro escandaloso del vecino no sirve de nada. Cierra puertas y ventanas, aíslate y si es domingo al mediodía por ningún motivo se te ocurra ver el juego de los Pumas, no cometas semejante atrocidad, si no quieres que ese leve dolor de cabeza que te cargas se convierta en una taladrante migraña.
Ahora, si los Pumas juegan contra nuestros Guerreros, entonces ni hablar, a jugársela, eso sí con todo el kit de primeros auxilios contra la traicionera resaca. Barbacoa, menudo o gorditas deberán de ser nuestros aliados, a continuación, tramitar un amparo con la señora para que nos permita ingerir no una, sino varias cervezas dos horas antes de las dos de la tarde (2 PM horario internacional que avala en fin de semana destapar la primera).
Solo así puedes ver el partido sin el riesgo de un apagón cerebral. Es que algo pasa con esos partidos dominicales de la UNAM a las lagañosas doce del mediodía, es de los únicos partidos que puedes ir a la cocina por cualquier vianda sin ningún apuro ya que el cero a cero se mantendrá inamovible, al minuto quince como al minuto setenta.
El tedio invade y se apodera de los osados asistentes a CU y a los televidentes, todos, entramos en una especie de adormecimiento e ingresamos a The Twilight Zone, donde nada es verdad ni nada es mentira todo depende de la tele con que se mira. Así han sido a lo largo de los años estos nembutales futbolísticos. La directiva unamita ya anunció que hoy será el último partido de Pumas domingo a mediodía al menos en este torneo, dependerá de la respuesta de la afición estudiantil para ya de plano erradicar esa tortura medieval.
Últimamente el equipo de Lillini ha mostrado una enorme capacidad para recibir una tras otra, humillantes derrotas que se desencadenaron desde la zarandeada en Barcelona. Llegando, otra paliza de parte del América en Ciudad Universitaria y cuando parecía que decían basta de indignidades ganándole al Atlético San Luis 0-2, les dan la vuelta y sumaron otra derrota, otros tres a su ya canasta básica de goles.
Parece ideal que, aun siendo el peor visitante del torneo, Santos Laguna aproveche la penosa inercia perdedora en la que se encuentran atrapados los felinos para ganar por primera vez en gira en el torneo. Eduardo Fentanes ha encontrado la fórmula del carburex, pero al parecer solo funciona en el clima desértico lagunero. Los próximos seis puntos se disputarán muy lejos de nuestra querida región, hoy en el estadio olímpico universitario y el jueves en partido adelantado de la 16 en casa de unos desconocidos (para bien) Xolos de Tijuana.
Para aspirar a cosas importantes y reafirmar la campaña de Modo Revancha hay que sumar de visita, ganando lejos de casa dota de mayor confianza al futbolista y lo convence que se está para aspirar a instancias finales. En fin, muchachos, ya les advertí lo riesgoso que es ver a Pumas el mediodía del domingo si te desvelaste la noche del sábado, no digan que no se los advertí, se les diero algunos remedios, pero sin duda, el mejor será que nuestros Guerreros ganen, así quedaremos frescos como una lechuga y dispuestos a la celebración, pero esta ya deberá de ser recatada con aguas dulces, tampoco sean volados que mañana hay que jalar.