Entre los habitantes laguneros de los siglos XIX y XX, destacan algunos que los llamaremos o los ubicaremos como personajes populares, por haber sido muy conocidos en su comunidad y alrededores, debido a sus acciones, las que no eran culturales ni académicas, sino que venían a ser todo lo contario. En esta ocasión daremos a conocer las acciones por las que se conoció a una brava mujer lagunera que surgió de las leyendas laguneras.
El personaje a quien hoy nos referiremos fue una mujer reconocida como bandida y que respondió al nombre de Apolinaria García, quien fuera ampliamente conocida en el campo lagunero como "La china polinaria", de nuestro personaje se desconocen datos biográficos, solo se sabe que para el año de 1872 surgió en la región de Jimulco, junto a una gavilla de salteadores a los que dirigía y a los cuales vestía igual que ella, como apaches, para el efecto de causar un mayor impacto y temor en los poblados en que incursionaban para asaltarlos.
La escasa información que se tiene de la "China polinaria" es en el sentido que su proceder era en venganza por la forma tan aparatosa como murió su esposo, afirmando nuestro personaje que por tal motivo gozaba "derramando sangre". Sus correrías, asaltos y asesinatos se dieron en la mayoría de los poblados laguneros de Coahuila y Durango, en los cuales se le tenía un gran temor por el salvajismo, tanto de ella como de los bandoleros que la acompañaban, habiendo asesinado a un conocido hacendado de nombre Carlos Gutiérrez.
Una de las más notables características y modo de actuar de la "China polinaria" fue la de la burla que les hacía a aquellos que eran varones y a quienes habían tomado como presos, a los cuales los tiraba en el piso previo haberlos atado de pies y manos y una vez que los mismos eran tirados al suelo, nuestro personaje se ponía frente a ellos diciéndoles que su mayor deshonra sería la de haber perdido la vida por una mujer, para de inmediato levantarse su blusa y dejar que vieran sus senos, para inmediatamente después de lo anterior, privarlos de la vida.
La leyenda de la china polinaria reseña que esta fue vista en los primeros años del siglo XX, aproximadamente en la década de 1910 en el poblado de Mieleras, en donde dicen que radicó junto a una hijastra.
Nuestro personaje contrariamente a lo que podemos pensar, debido a la vida delincuencial que llevó, vivió los últimos años de su existencia tranquilamente en Mieleras, su última fechoría la realizó en la hacienda de La Loma ya para terminar el siglo XIX, falleciendo en familia a una edad avanzada.
