
Ningún pasajero, con sus excepciones, necesitará boleto para viajar en tren, autobús o tranvía. (INTERNET)
A partir del pasado 1 de marzo, Luxemburgo, un pequeño país europeo ubicado entre Bélgica, Francia y Alemania, se ha convertido en el primero en el mundo con un sistema de transporte público gratuito.
Ningún pasajero necesitará comprar boleto o pagar tarifa para usar autobuses, trenes o tranvías en el territorio nacional, informa el servicio del transporte público del país en su página web.
Habrá excepciones para los viajes en primera clase en trenes y para algunos servicios de autobuses nocturnos.
El proyecto llamado 'Modu 2.0' tiene como objetivo disminuir el tráfico de automóviles y reducir así la contaminación del aire.
Según The Guardian, una encuesta realizada por la compañía TNS Ilres en 2018, reveló que 47% de los luxemburgueses preferían ir al trabajo en coche, mientras que sólo el 32% de lo hacían en autobús y 19% por tren. Con una población de alrededor de 600 mil personas, Luxemburgo tiene más automóviles por cada mil habitantes que cualquier otro país europeo.