Describir un dedo en su sentido real no representa mucho problema. Los dedos son apéndices articulados de la mano y también del pie, tanto en el ser humano como en muchos otros animales.
Sin embargo, la palabra "dedo" cobra gran importancia si consideramos que es utilizada muy frecuentemente en sentido directo o figurado en nuestro hablar cotidiano.
Cuando no se tienen grandes habilidades matemáticas, lo primero que hacemos es contar con los dedos -generalmente de la mano- y aunque son sólo diez, podemos utilizarlos repetidamente para números mayores.
Los dedos se usan mucho también como medida. Una persona que tiene pocas entendederas, se dice que sólo tiene "dos dedos de frente" porque hay la creencia popular que el ancho de la frente es representativo de la inteligencia de una persona. Así que un individuo con sólo dos dedos de frente, tiene muy poca frente y según esa creencia es bastante tarado.
Los niños en las escuelas levantan el dedo índice para hacerse notar con la maestra, ya sea porque quieren lucirse contestando una pregunta que ella hizo o porque quieren pedir permiso para ir al baño porque están a punto de hacerse pipí en el salón.
Ahora que si usted levanta el dedo cordial -el de en medio- cuando va manejando, y se lo muestra a alguien, le estará diciendo una grosería, porque el otro conductor se le atravesó o por alguna otra razón que le hizo enojar.
"No quiero que la gente me señale con el dedo", dice una persona que se resiste a cometer un acto ilícito y deshonroso que después, al señalarle con el dedo, lo entenderá como que lo están juzgando por ese acto delictivo que tal vez no cometió.
Cuando la señora llega del súper cargada de bolsas y el marido está muy "ocupado" bebiendo cerveza y viendo el futbol, ella se quejará: "Mira cómo vengo y tú ni siquiera mueves un dedo para ayudarme".
Cruzar los dedos es "hacer changuitos" cuando deseamos tener buena suerte en algo y "tronar los dedos" es símbolo de prepotencia, cuando el jefe le pide algo al subordinado y "le truena los dedos" para que se mueva rápidamente a obedecer lo que se le está ordenando.
En la sucesión gubernamental, llegó a ser muy común el "dedazo", cuando el gobernante en funciones señalaba al que iba a ser su sucesor. Y mejor ya no le busco más aplicaciones a la palabra dedo porque estoy seguro de que se las voy a encontrar.
Soy Don Juan Recaredo… compártame sus dudas y comentarios: [email protected] Twitter: @donjuanrecaredo
ME PREGUNTA:Ana Álvarez:
¿Por qué mucha gente usa frases como "lo que es" y "lo que viene siendo"? Tal vez sean correctas gramaticalmente, pero son redundancias que no tienen sentido.
LE RESPONDO:
No son redundancias. Son las llamadas muletillas, que mucha gente usa cuando tiene un léxico escaso o poca facilidad para expresarse.
LAS PALABRAS TIENEN LA PALABRA:
Escribir es simplemente pensar con los dedos.