
La salsa es un acompañante que no puede faltar en la mesa de las familias mexicanas, adaptándola a nuevos sabores y estrategias para innovar las recetas. (ESPECIAL)
La salsa es un acompañante que no puede faltar en la mesa de las familias mexicanas, adaptándola a nuevos sabores y estrategias para innovar las recetas.
Es por ello, que los chefs Ricardo Verdejo y Miguel Sánchez comparten para El Universal sus mejores recetas para acompañar antojitos mexicanos; salsas con un toque de licor de café.
Salsa de epazote
Recomendada para acompañar pambazos, quesadillas, taquitos dorados y tostadas. Necesitas los siguientes ingredientes:
*100 g hojas de epazote
*15 piezas de limones
*100 gramos de azúcar
*60 ml de salsa de soya
*2 ml de aceite de sésamo o ajonjolí
*80 ml de aceite de cocina suave
*5 chiles serrano
Pela los limones intentando que no queden residuos de la parte blanca y exprimelos en un recipiente. Reserva la cáscara.
En un cazo deposita la cáscara con 100 gramos de azúcar y 60 ml de agua. Cocina a fuego medio hasta que se caramelicen. Añade el jugo de limón y mueve hasta que se derrita la mezcla al punto del caramelo.
Agrega la soya y un chorrito de aceite de sésamo/ajonjolí. Mezcla hasta que esté hecha una pasta y deja que enfríe durante unos minutos.
Vierte la mezcla en una licuadora con chile serrano y 100 gramos de hojas de epazote. Sirve y disfruta.
Salsa de cacao
Esta salsa se recomienda hacerla acompañada de los totopos o con frijoles para darle un toque diferente a los antojitos mexicanos. Requerirás lo siguiente:
*500 gramos de zanahorias
*150 gramos de cebolla blanca
*300 gramos de champiñón
*2 dientes de ajo
*Tomillo fresco
*50 gramos de mantequilla
*50 gramos de cacao molido
*100 ml de licor de café
*3 piezas de chile ancho (opcional)
A fuego suave, agrega cebolla, un diente de ajo y una ramita de tomillo. Cocina hasta que la cebolla esté tierna y transparente. Luego agrega las rebanadas de champiñones (aproximadamente ocho piezas) y cocina hasta que estén dorados.
Agrega una cucharada de cacao, 100 ml de licor de café y cocina hasta que se evapore el alcohol. Agrega las zanahorias cortadas en rodajas y 100 ml de agua; cocina a fuego lento con la cacerola tapada entre 15 y 12 minutos. Asegúrate que la zanahoria esté suave.
Condimenta con sal y pimienta a tu gusto, agrega 50 g de mantequilla. Una vez que todo esté listo, muele hasta conseguir una textura cremosa. Agrega hojas de perejil picadas y aceite de oliva.
Si buscas que esté un poco más picosa, hiever de una a tres piezas de chile ancho y agrega al momento de licuar.
Sí deseas agregar un sabor a café más fuerte a tu cena, puedes intentar con un carajillo agitado, mezclando hielos y 75 ml de licor de café clásico o de avellanas y agita por 30 segundos. Sirve en un vaso corto con cubos de hielo y decora con un poco de cáscara de naranja flameada.