Los únicos exentos de no pagar son los residentes. (INTERNET)
En la villa italiana de Polignano a Mare han colocado barreras con torniquetes y ningún turista puede entrar a ciertas zonas a menos que pague una cuota de cinco euros.
El gobierno de esta comunidad señala que es por seguridad, para controlar la cantidad de gente que visita en esta época del año y así preservar el lugar, informa The Daily Mail.
Sin embargo, la medida ha sido fuertemente criticada en la red, donde se señala que la decisión es una forma deshonesta de comercializar con un lugar además público.
“Hubieran instalado los torniquetes aunque no hubiera habido tarifa de entrada”, señala por su parte el alcalde Domenico Vitto, al diario italiano La República, publicación que añade que durante la primera semana, unas 12 mil personas visitaron el lugar, haciendo a la ciudad ganar alrededor de 66 mil dólares sólo en ese lapso de tiempo.
DA.