
REFRANERO DEL QUIJOTE LOS DUELOS CON PAN SON MENOS
El Quijote II, 13
Conversan don Quijote y el Caballero del Bosque entre ellos y por separado sus respectivos escuderos. En plan burlón, Cervantes escribe que "la historia cuenta primero el razonamiento de los mozos y luego prosigue el de los amos". Que los primeros se contaron sus vidas y los segundos sobre sus amores.
El escudero del Caballero del Bosque se queja de lo difícil que es la vida de ellos. Se duele de que es "verdad que comemos el pan con el sudor de nuestros rostros, que es una de las maldiciones que echó Dios a nuestros primeros padres".
"- También se puede decir -añadió Sancho- que lo comemos en el hielo de nuestros cuerpos, porque ¿quién más calor y más frío que los miserables escuderos de la andante caballería?
Y aun menos mal si comiéramos, pues "los duelos, con pan son menos", pero tal vez hay que se nos pasa un día y dos sin desayunarnos, si no es del viento que sopla".
Con alguna provisión en la despensa, es decir, si se tiene al menos algo qué comer, se pueden sobrellevar mejor las penalidades de la vida.
En tiempos de Cervantes tenía este refrán otra versión que decía: "Los duelos con pan son buenos", que es obvio difiere de la primera.
Aunque ha prevalecido la forma como arriba se enuncia, Sancho sin embargo emplea la otra versión cuando "cayeron él y el rucio [como llamaba a su jumento] en una honda y oscurísima sima" y le dio al animal un pedazo de pan, "que no le supo mal, y díjole Sancho como si entendiera: todos los duelos con pan son buenos" (II, 55)
@jagarciavilla