
Asistir. Actualmente el Arocena expone Gerardo Cantú. Un mismo amor, vivencias y videncias.
Actualmente el Museo Arocena alberga la exposición "Gerardo Cantú. Un mismo amor, vivencias y videncias", un homenaje a la gran trayectoria del artista coahuilense, uno de los más importantes exponentes del nuevo humanismo en el arte, que desde mediados del siglo XX se perfiló como una continuación de la Escuela Mexicana de Pintura, comprometida con la representación de la figura humana.
Su obra comprende desde tópicos muy habituales en la pintura, como son el retrato o el bodegón, hasta relatos sociales, políticos o eróticos, dotados de una notable complejidad compositiva e imaginativa.
Estudió en el taller de Artes Plásticas de la Universidad de Nuevo León y posteriormente en la Escuela Nacional de Pintura, Escultura y Grabado La Esmeralda. También estudio en Praga y París.
Cabe destacar la obra muralista desarrollada a lo largo de la trayectoria artística de Gerardo Cantú, quien a los quince años de edad le fueron encomendados sus primeros murales para La Capilla de la Secundaria número 1 de Nuevo León. Dicha labor pictórica siempre ha estado presente en la vida del artista desarrollando así un importante número de murales ubicados principalmente en el estado de Nuevo León.
Ha realizado importantes exhibiciones en Argentina, Brasil, España, India y México. Ha obtenido muy diversos premios de adquisición, así como menciones honoríficas de pintura y grabado otorgados por el Salón de la Plástica Mexicana, entre otras instituciones. En 2011 recibió el Premio a las Artes de la Universidad Autónoma de Nuevo León.
Desde sus inicios, Cantú buscó mediante formas precisas, un sentido profundo en su obra. Cuando se formó en la Escuela Nacional de Pintura, Escultura y Grabado "La Esmeralda" tuvo la oportunidad de tener a maestros de la talla de Pablo O→ Higgins, Ignacio Aguirre y Carlos Orozco Romero. Contando con sólo diecinueve años conoció a Diego Rivera, con quien compartió una tarde en compañía del General Lázaro Cárdenas, en su estudio de Altavista.
Un gran coahuilense
El pintor Gerardo Cantú, nació en 1934 en Nueva Rosita, Coahuila. Desde pequeño comienza a dibujar "monos" como él los llama, para no aburrirse mientras su madre visitaba a sus amigas, acostumbraba llevar papel y lápiz para entretenerse. Como él lo menciona: siempre he dibujado, pero con una especie de vicio, es esto lo que me ha ayudado mucho en mi vocación. De estos dibujos se desprenden diversos temas que el artista trabajará no sólo en esta técnica, sino también en gráfica y pintura: Beso robado en primavera (1972), El poeta y la musa (1972), El discreto encanto (1976), también desnudos y escenas plagadas de sensualidad como Problemas de amor II (1982), Desnudo con pájaro (1980) y la serie de Las tentaciones de San Antonio (1995-2000). Otro asunto que llama su atención es la crítica social en El ojo de la aguja (2001) y El veneno de la imprenta (1976).