
Salud. Un 3% de los mexicanos ya padece obesidad mórbida, según la más reciente Encuesta Nacional de Salud y Nutrición.
Entre la población mexicana se están viendo hoy en día cada vez más casos de obesidad mórbida u obesidad grado 3, el mayor grado en la clasificación que de esta enfermedad estableció la Organización Mundial de la Salud (OMS).
"Sí, según la más reciente Encuesta Nacional de Salud y Nutrición, publicada el año pasado por el gobierno federal, la obesidad mórbida ya la padece 3% de la población, lo cual representa una gran carga para los hospitales y los servicios de salud, así como una enorme fuente de problemas para el mercado laboral y, en general, para la sociedad en su conjunto", dice el doctor Juan Pablo Méndez Blanco, académico de la Facultad de Medicina de la UNAM y coordinador de la Unidad de Investigación en Obesidad que esta institución de educación superior tiene en el Instituto Nacional de Ciencias Médicas y Nutrición "Salvador Zubirán".
La Organización Mundial de la Salud fijó los tres grados de la obesidad de acuerdo con el índice de masa corporal (IMC) de los individuos (éste se saca dividiendo el peso de la persona entre el cuadrado de la talla o estatura; el índice de masa corporal normal es de 20 a 25; y se considera sobrepeso de 25 a 29.9); obesidad grado 1, de 30 a 34.9; obesidad grado 2, de 35 a 39.9; y obesidad grado 3 u obesidad mórbida, de 40 en adelante.
"Los obesos mórbidos son los más obesos de entre los obesos, los que presentan mayores complicaciones no sólo metabólicas (las cuales se ven desde los primeros grados de obesidad), sino también locomotoras por osteoartrosis e inmovilidad, y, por consiguiente, los que requieren mayor atención médica", apunta Méndez Blanco.
OBESIDADES Se han asociado muchos genes al desarrollo de la obesidad, pero se ha demostrado que muy pocos son causales directos de esta enfermedad.
Ahora bien, realmente no se puede hablar de una sola obesidad, sino de varias obesidades, porque es muy diferente una obesidad mórbida u obesidad grado 3 en un joven que una grado 1 en un adulto de 50 ó 60 años.
"Son entidades patológicas totalmente diferentes. El sexo y la edad de la persona, así como el grado de obesidad que alcance, van a determinar los factores de riesgo, los pronósticos y la calidad y esperanza de vida."
De este modo, desde el punto de vista genético, hay tres tipos de obesidades: 1) las que forman parte de un síndrome, como el de Prader-Willi o el de Lawrence Moon Biedl, que aparecen como consecuencia de factores genéticos muy claros (la falta de un pedazo de cromosoma o de un gen, la mutación de un gen, etcétera); 2) las monogénicas, que son resultado de la mutación de un solo gen (de la leptina, del receptor de la leptina, del MCR4, etcétera); y 3) las comunes, en las que no se ha demostrado que algunos genes las causen de manera directa, pero en las que sí se han encontrado variaciones genéticas, lo que significa que, en ciertas poblaciones, un gran porcentaje de los obesos presenta un cambio genético que no presenta -o presenta muy poco- la gente que no es obesa.
"Lo único que muy probablemente demuestra esto último es que no se ha podido determinar que muchas de estas obesidades comunes no son poligénicas, es decir, no son ocasionadas por la alteración de muchos genes, sino monogénicas también, pero todavía no se ha hallado su alteración específica", comenta el experto Juan Pablo Méndez Blanco.
Es importante señalar que los dos primeros tipos comprenden, cuando mucho, 8% del total de los casos; y las comunes, el resto, 92%.
BALANCE ADECUADO Diversos estudios han comprobado que de 40% a 60% de los casos de obesidad son secundarios a alteraciones genéticas, aunque éstas aún no hayan sido identificadas con precisión. Por otro lado, esto no indica que alguien tenga un gen que lo hace tener un metabolismo diferente y ser obeso. Sí hay alteraciones del metabolismo predeterminadas genéticamente que condicionan la obesidad, pero son muy pocas.
Lo que sucede es que el obeso no puede parar de comer, come en exceso, y un gran componente de este comportamiento está determinado también genéticamente.
Así pues, mientras las personas delgadas o esbeltas se restringen y no comen hasta saciar por completo su apetito, los obesos comen sin parar hasta sentirse muchas veces más que satisfechos, y eso es lo que definitivamente condiciona la obesidad.
Cirugía bariátrica para la obesidad grado 1
⇒ Antes, los obesos mórbidos eran los únicos a los que se sometía a una cirugía bariátrica; ahora ya se está considerando operar también a personas con obesidad grado 1, pero que ya presenten alteraciones metabólicas.
⇒ "Con una cirugía bariátrica es posible revertir la diabetes y las dislipidemias (anomalías en el equilibrio de lípidos en la sangre); el problema es que los pacientes operados pueden presentar varios tipos de efectos adversos y que los costos quirúrgicos son grandes", informa Méndez Blanco.
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Transición epidemiológica en México
⇒ Hace tres décadas, más o menos, se consideraba que el grueso de la población mexicana moría por enfermedades de la pobreza y el subdesarrollo, como las infectocontagiosas, las neumonías, las diarreas y la desnutrición.
⇒ En los últimos 20 ó 25 años, México llegó a la llamada "transición epidemiológica"; es decir, en todo el territorio nacional seguía habiendo muertes por problemas del subdesarrollo, pero se empezaron a ver, asimismo, muertes por enfermedades del desarrollo, como las cardiovasculares y los cánceres.
⇒ Actualmente, estas enfermedades crónicas ("de gente rica", se creía) ya se están volviendo también de la pobreza porque cada vez se ven más casos de obesidad en los grupos económicamente vulnerables.
⇒ "Hay estudios realizados en Estados Unidos, en los cuales se ha comprobado que la gente que vive en un barrio con un nivel socioeconómico bajo disminuye de peso si se cambia a uno de mayor nivel, y viceversa: la gente que vive en uno con un mayor nivel socioeconómico aumenta de peso si se cambia a uno de más bajo nivel. Este fenómeno, muy frecuente en nuestro país, se debe a que los alimentos más baratos son los que hacen que la gente aumente más de peso. Así las cosas, los mexicanos tenemos ahora un problema muy complejo porque sigue habiendo comunidades con muchísima desnutrición y están surgiendo cada vez más comunidades con una obesidad importante", dice Méndez Blanco.