Llamativas pulseras en oro y plata trabajadas en formas orgánicas.
Los joyeros mexicanos están al alza, por ejemplo, Daniel Espinosa diseña para Madonna, Nelly Furtado y Eva Longoria y tiene más de 500 puntos de venta en todo el mundo.
Firmas como Talleres de los Ballesteros y creativas como Delia González y Tanya Moss también venden, con mucho éxito, en diferentes países.
A diferencia de los diseñadores de ropa, a quienes les ha costado trabajo destacar a nivel nacional e internacional, los accesoristas han encontrado el camino.
Mónica Benítez, gerente del Centro de Información de Moda del Grupo Peñoles, opina que en el gremio joyero nacional la constante de crear piezas conceptuales y cerrar buenos negocios.
“Mientras el diseñador de moda está ávido de aparecer en fotografías puliendo una imagen social, los orfebres invierten dinero en promover su marca, integrada con productos de sello único”, afirma la investigadora de tendencias en joyería.
La experta reconoce que el punto de partida ha sido la plata, material dúctil que en manos de artistas ha conseguido una personalidad que les ha llevado a saborear el triunfo fuera de México.
“Daniel Espinosa es un parteaguas. Con su propuesta y mercadotecnia abrió la puerta a otros colegas, entre ellos: Martha Vargas, Tanya Moss, Mauricio Serrano, Víctor Sabido y Flora María, que acaba de abrir una tienda en España”, revela Benítez.
Estos creativos han hecho florecer el arte de la joyería mexicana en los aparadores de diferentes ferias, entre ellas, la de Basilea, espacio en el que se cobra alrededor de 70 mil euros (cerca de un millón 200 mil pesos) por disfrutar de un pequeño aparador.
“Además de Daniel, otros diseñadores han empezado a exportar. Más que de divas, el sector está integrado por artistas que se han convertido en empresarios.
“Por sus logros, yo les aplaudo. El mundo empieza a reconocer a estos mexicanos que pueden tener algunas diferencias, lo que no impide que se apoyen entre ellos”, asegura.
Para Benítez, quien anualmente presenta un resumen de tendencias mundiales que se adaptan al gusto del comprador nacional, los joyeros del País destacan por su talento y cualidades.
“Actúan con tesón, muestran originalidad, buscan reinventarse y estar a la vanguardia”, concluye.
Sellos inconfundibles
>La geometría de Daniel Espinosa
>El arte figurativo de Tanya Moss
>La feminidad orgánica de Martha Vargas
>La vanguardia oriental de Mauricio Serrano
>El arte floral mexicano de Flora María
>La innovación colorida de Víctor Sabido
>Otros joyeros que brillan en el ámbito nacional
Edith Brabata, Ana Checa, Édgar López, Ricardo Domingo, Paula Guzmán, Carmen Lucía Sandoval y
Arturo Chávez.
