
Desde las 7:00 horas varias personas hicieron una larga fila para esperar la apertura del Museo Nómada, la cual se realizó alrededor de las 10:00 horas.
Cientos de personas hacen fila desde las 07:00 horas para ingresar a la exposición de Gregory Colbert.
El sábado a las 10:00 horas se abrió por primera vez al público mexicano el Museo Nómada, instalado en la plancha del Zócalo capitalino para exponer la muestra fotográfica Cenizas y Nieve de Gregory Colbert.
Decenas de personas, en su mayoría jóvenes, se dieron cita en este lugar desde las 07:00 horas, en donde hicieron fila a un costado del museo para ingresar a la muestra. Al interior del museo donde se exhiben 53 fotografías y dos películas queda prohibido el ingreso con celulares, cámaras fotográficas con flash, así como fumar.
Durante la espera los asistentes observaban la arquitectura hecha con bambú y contenedores de barcos que fueron instalados en este espacio.
Como si se tratara de una inmensa choza de alguna tribu amerindia o africana, pero con toques vanguardistas del Siglo XXI, el Museo Nómada de la Ciudad de México lució su magno diseño.
Cientos de varas de bambú sujetas en forma de abanico o como pilares invertidos, suspendidos en el aire, discretamente iluminados, se convierten en la atmósfera ideal para transportar al público a un lugar de tranquilidad y olvidar por un instante la ajetreada actividad del Zócalo capitalino, sobre el cual fue construido.
La tenue luz de su interior, con algunos destellos sobre sus techos de dos aguas, hacen que los 16 metros de altura parezcan de mayores proporciones, sobre todo cuando los pilares suspendidos son reflejados por algunos de los espejos de agua colocados en el piso, que le dan una sensación de inmensidad al lugar.
Esa iluminación, que al mismo tiempo resalta cada una de las obras, provoca que al recorrer los largos pasillos de este inmueble, el espectador sienta que mira a través de varias ventanas, en lugares distintos del planeta.
De esa forma, el arquitecto colombiano Simón Vélez buscó plasmar el deseo de Gregory Colbert, quien a través de Ashes and Snow (Cenizas y Nieve) refleja la narración imaginaria de un viajero, quien, por medio de una travesía de un año, le escribe a su esposa 365 cartas donde le describe cada lugar: “Se trata de 365 cartas que le escribe un amado a su esposa, porque se desaparece y es una carta por cada día de su ausencia”.
Gran diseño
El Museo Nómada fue diseñado originalmente por Shigeru Ban, uno de los mayores representantes japoneses de las estructuras de papel, bajo un concepto que diera la sensación de movilidad. Aunque la estructura del museo, luego de cinco presentaciones (Tokio, Venecia, Nueva York, California y México) continúa esencialmente formada por contenedores metálicos, de los que se cargan en los barcos de mercancías, cubiertos por una membrana textil que hace las veces de techo.
El interior, que en los primeros diseños estuvo formado de pilares y vigas de papel que sostenían los techos y soportaban las fotografías, colgadas por hilos invisibles, da paso a bambú traído desde Colombia y para construir este inmueble que abarca una superficie de cinco mil 600 metros cuadrados, fueron necesarios 80 mil metros lineales de bambú.
Durante las nueve semanas que tardó su construcción se emplearon 400 trabajadores, supervisados por 36 especialistas colombianos; en total se emplearon 400 mil horas-hombre para la construcción de esta obra.
En el proceso de armado del museo se utilizó una estructura de andamios que ocupó un volumen superior a los 56 mil metros cúbicos y dos grúas de gran capacidad que sirvieron para ubicar los contenedores que dan soporte a la estructura.
Destaca también que se cubrieron diez mil metros cuadrados con pintura y se colocaron 11 mil 700 metros cuadrados de lámina galvanizada en muros y techos.
Este magno museo alberga las 53 fotografías de 3.5 por 2.5 metros, que fueron captadas a partir de alrededor de 40 expediciones a lo largo y ancho de la Tierra, desde los fríos paisajes de la Antártica o Burma, hasta los desiertos de Egipto, Kenia y Namibia, sin olvidar las islas de Tonga en el Pacífico Sur o la de Borneo en el Océano Índico.
El Museo Nómada permanecerá abierto al público hasta el 27 de abril próximo y el acceso es totalmente gratuito. Y cabe mencionar que de todos los lugares en donde Colbert ha montado el museo ésta será la primera vez en el mundo que la entrada será gratuita todos los días de la muestra para que la gente se integre a este diálogo con la naturaleza.