EDITORIAL Caricatura Editorial Columna Astillero Sergio Sarmiento editoriales

El sexto informe del grupo intergubernamental de expertos sobre el cambio climático (I)

A la ciudadanía

MANUEL VALENCIA CASTRO

En el Sexto Informe del IPCC se entregan una serie de Informes de Evaluación, Informes Especiales, Documentos Técnicos e Informes Metodológicos que han sido fundamentales en las negociaciones y acciones internacionales para hacer frente al cambio climático. De manera que lo que llega a nosotros es producto de las revisiones que se hacen en dichas negociaciones y de los ajustes técnicos de los expertos.

En esta primera colaboración sobre el tema abordaré el Informe Especial sobre el Cambio Climático y la Tierra (SRCCL), el cual es de naturaleza interdisciplinaria y reúne a un número sin precedentes de expertos de diversos campos de investigación. Su experiencia abarca desde sistemas agrícolas y medios de vida rurales hasta nutrición y silvicultura. Más de 52 países diferentes de todas las regiones del mundo estuvieron representados en los equipos del capítulo y, por primera vez en un informe del IPCC, la mayoría de los autores (53%) eran de países en desarrollo. Por parte de México colaboraron los científicos Dulce Flores-Renteria y Felipe Garcia-Oliva, y con la representación de los Estados Unidos y México Erik Mencos Contreras.

Una novedad en este informe es el uso de modelos de probabilidad para indicar un grado de confianza de que el fenómeno que se menciona ocurra tal cual (nivel de confianza muy alto) o no suceda (nivel de confianza muy bajo). En el encuadre y contexto del informe especial para los tomadores de decisiones o hacedores de políticas públicas, se ponderan los servicios ambientales de los ecosistemas desde diferentes enfoques, incluido el económico, lo cual desde mi punto vista es más que pertinente, ya que por lo general en el medio político todos estos aspectos se ignoran, provocando actitudes indolentes o de inactividad, o peor aun, decisiones equivocadas, este es el punto en el que nos encontramos los laguneros.

Dice el Informe que: "la tierra, incluidos sus cuerpos de agua, proporciona la base para el sustento y el bienestar humanos a través de la productividad primaria, el suministro de alimentos, agua dulce y muchos otros servicios de los ecosistemas (nivel de confianza alto). Ni nuestras identidades individuales o sociales, ni la economía mundial existirían sin los múltiples recursos, servicios y sistemas de sustento que brindan los ecosistemas terrestres y la biodiversidad.

El valor anual de los servicios de los ecosistemas terrestres totales del mundo se ha estimado en 75 billones de dólares en 2011, aproximadamente equivalente al Producto Interno Bruto mundial anual, basado en valores de 2007 en dólares estadounidenses (confianza media). La tierra y su biodiversidad también representan beneficios esenciales e intangibles para los seres humanos, como el enriquecimiento cognitivo y espiritual, el sentido de pertenencia y los valores estéticos y recreativos. "

Un ejemplo local de esto último son los altos valores estéticos y recreativos que disfrutamos en una visita al Parque Estatal Cañón de Fernández, los bellísimos paisajes que alimentan nuestro espíritu y mejoran nuestra calidad de vida, son suficientes para oponerse a su destrucción y/o modificación. Estos son los servicios ecosistémicos intangibles que corresponden al valor intrínseco de la biodiversidad del Parque.

En el encuadre hay una aseveración que nos exhorta a cambiar nuestra actual modelo de aprovechamiento de los recursos: "El uso de los recursos de la tierra de manera sostenible es fundamental para el bienestar humano (alta confianza)." Más adelante se analiza esta relación.

Por otra parte, el uso no sustentable de la tierra se expresa en diferentes indicadores del informe, por ejemplo, cuando señala que la gran apropiación de múltiples servicios de los ecosistemas y la pérdida de biodiversidad sin precedentes en la historia de la humanidad y consigna la siguiente cuantificación de dichos indicadores: Para 2015, alrededor de las tres cuartas partes de la superficie terrestre sin hielo mundial se vió afectado por el uso humano, de un cuarto a un tercio de la producción primaria neta terrestre del Planeta (en forma de alimentos, piensos, fibras y energía) fueron ocupados por el hombre (nivel de confianza alto), y el uso de la tierra provocó que la biodiversidad mundial se redujera entre un 11% y un 14%. Los principales ecosistemas sobreexplotados son entre un 60% y un 65% los bosques y del 70% al 90% otros ecosistemas naturales como los pastizales naturales y sabanas (nivel de confianza alto).

La primera urgencia del informe es en el siguiente tenor: "Una acción urgente para detener y revertir la sobreexplotación de los recursos de la tierra amortiguaría los impactos negativos de múltiples presiones, incluido el cambio climático, sobre los ecosistemas y la sociedad (nivel de confianza alto)." No en balde, localmente se insiste hasta el cansancio, en la urgente necesidad de tomar medidas para detener la sobreexplotación del agua subterránea y en lo posible recuperar el acuífero mediante la recarga agua de las presas en el lecho seco del río, pero nosotros los laguneros parece que navegamos a contracorriente de las tendencias mundiales.

Leer más de EDITORIAL

Escrito en: A la Ciudadanía editorial A la ciudadanía

Noticias relacionadas

Siglo Plus

+ Más leídas de EDITORIAL

TE PUEDE INTERESAR

LECTURAS ANTERIORES

Fotografías más vistas

Videos más vistos semana

Clasificados

ID: 1995944

YouTube Facebook Twitter Instagram TikTok

elsiglo.mx