Iracheta dijo que se siguen creando municipios sin que se generen condiciones para que puedan trabajar con sus municipios vecinos. (ARCHIVO)
El director general del Centro EURE, Alfonso X. Iracheta Cenecorta, declaró que hay que elevar la metropolización a rango constitucional y acompañarla con una reforma dentro de la Ley General de Asentamientos Humanos, Ordenamiento Territorial y Desarrollo Urbano, con la finalidad de atender y resolver los retos de la conurbación y metropolización como el abasto de agua potable para los habitantes, entre muchos otros.
Julián Mejía Berdeja, presidente de Renacer Lagunero, sostuvo una entrevista con Iracheta Cenecorta, consultor en planeación, legislación y gobernanza territorial y metropolitana, quien manifestó que lejos de debilitar la soberanía de los municipios, los fortalecería, ya que los elevaría como orden de gobierno precisamente por su capacidad para atender y resolver los retos de la conurbación y metropolización.
Aunado a lo anterior, el especialista dijo que se debe reformar la Ley de Coordinación Fiscal para lograr con ello, no solo una relación fiscal más justa entre los estados con la Federación, sino también, entre las zonas metropolitanas con el Gobierno federal, precisamente en vista de la actividad económica que en ellas se genera, por su recaudación, por su dinámica poblacional y sus desafíos políticos, sociales, administrativos y ambientales que enfrentan.
Otro tema es el de la remunicipalización y rerregionalización, ya que esto daría pie a una reconfiguración más funcional, eficiente y puntual de la política pública y la gestión gubernamental, pues responde a una realidad y a una dinámica espacial y territorial.
Iracheta consideró que debe analizarse esa posibilidad, sobre todo porque en la actualidad se siguen creando municipios sin que en paralelo se generen las condiciones para que puedan trabajar con sus municipios vecinos y atender juntos temas regionales y metropolitanos.
A todo esto, advierte el especialista, hay que sumarle el enorme reto que representa para el futuro de las metrópolis el escenario de creciente estrés hídrico. En ese sentido, el futuro y la sustentabilidad de las zonas metropolitanas dependerá de la medida en la que la ciudadanía logre ajustar al poder político y económico a la rectoría del Estado y al estado de derecho en materia urbana, territorial, ambiental e hídrica. "Se requiere de colaboración interjurisdiccional entre estados y municipios a través de entes que atiendan el todo, como puede ser un Instituto Metropolitano de Planeación (Imeplan),libre de conflicto de intereses que organice y ponga de acuerdo a la ciudadanía sobre el futuro de la metrópoli, así como a través de un Parlamento Metropolitano que reúna a los diputados locales de Coahuila y Durango que representen a esta región y en el cual discutan y acuerden, las homologaciones legales y los nuevos marcos jurídicos que le den coordinación y gobernanza a La Laguna para después llevárselos a sus respectivos congresos para que sean aprobadas", explicó el especialista.
