Ciudadanos de Eagle Pass y Piedras Negras, realizaron un rosario por los menores que sufren maltrato y memoria de la pequeña Victoria, una ciudadana norteamericana de tres años que murió debido a las severas lesiones presuntamente causadas por su madre y su padrastro; así como de Mauricio, un niño de seis años que murió debido a una desnutrición severa. (RENÉ ARELLANO)
Ciudadanos de Eagle Pass y Piedras Negras, realizaron un rosario por los menores que sufren maltrato y memoria de la pequeña Victoria, una ciudadana norteamericana de tres años que murió debido a las severas lesiones presuntamente causadas por su madre y su padrastro; así como de Mauricio, un niño de seis años que murió debido a una desnutrición severa.
Vestidos de blanco y portando globos del mismo color, alrededor de las siete de la tarde de este lunes 03 de mayo, ciudadanos norteamericanos y mexicanos se reunieron en ambas orillas del río Bravo, con la finalidad de elevar en una oración por los dos pequeños y rezar un rosario para luego soltar los globos.
Lo anterior fue organizado y convocado por Mónica Cruz, una activista de Eagle Pass, quien estableció como punto de reunión en la ciudad texana, los terrenos del Shelby Park, najo el Puente Internacional número I; mientras que, del lado de Piedras Negras, algunas personas se reunieron en el Paseo del Río, frente a sus vecinos.
“Yo creo que el dolor, la impotencia. Nada más de imaginar lo que sufrieron esas criaturas. Yo creo que eso es lo que nos hace estar aquí, y pues deberían ser sus padres los que deberían estar, y de cierta manera, como rendirles un homenaje; pero si sus papas fueron los que les hicieron tanto daño, si no venimos nosotros como ciudadanos, ¿quién va a venir?”, dijo la señora Eunice, originaria de Piedras Negras.
Sumamente conmovida, la voz se le entrecortaba, pues señaló que solo de imaginarse lo que vivió la pequeña Victoria, pues tiene hijos, nietos y nietas de la edad de Victoria; que, aunque son tremendos, no concibe hacerles daño jamás, y admitió no alcanzar a comprender ni entender tanta maldad.
Pablo Ramos, vecino de la colonia año 2000, fue otra de las personas que acudió al Paseo del Río en Piedras Negras, con la finalidad de participar en esta ceremonia para pedir por los niños que sufren maltrato; manifestó que le dio mucha tristeza por la niña, pues señaló que el maltrato que vivió fue excesivo.
“Realmente sí me pudo, como ve, tengo hijos pequeños y duele, Y decidimos, la familia, venir a esta ceremonia, muy emotiva y triste por la pérdida de la niña, pues no merecía ese maltrato”, señaló el emocionado padre quien, al igual que los integrantes de su familia, portaba una playera blanca.
Cabe mencionar que, en el caso del pequeño Mauricio, de seis años de edad, este lunes las autoridades de la Fiscalía General del Estado (FGE) de Coahuila, delegación norte I, dieron a conocer que la causa de su muerte derivó de un padecimiento congénito que le provocó la desnutrición severa; por lo que descartaron que sufriera maltrato infantil.
