La mujer, madre de 11 hijos y abuela de 60 nietos, agradeció a todo el personal médico que la atendió durante su enfermedad.(EL SIGLO DE TORREÓN)
Una mujer de 84 años de edad, madre de 11 hijos y abuela de 60 nietos, se convirtió en la paciente número 100 recuperada de coronavirus en la Torre COVID.
Rosa Carmen, quien nació el 16 de julio de 1936, sorprendió a los médicos del Hospital General de Zona (HGZ) No. 7 del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), al recuperar su salud en el piso de la esperanza de la Torre B del nosocomio.
La paciente recuperada nació en el pueblo de Abasolo, a 32 kilómetros de Monclova y consideró que gracias a los buenos hábitos alimenticios y a su vida tranquila, le ganó la batalla al virus SARS-CoV-2.
Para la médica internista Gabriela Castro Hernández, el alta de la abuelita de la cama 327 es un caso excepcional. "Llegó con insuficiencia respiratoria, en cinco días mostró mejoría y sin el apoyo de un tanque de oxígeno, se marchó a su domicilio" informó.
La evolución de Rosa Carmen fue muy notoria y la doctora lo atribuye a la buena actitud que siempre mostró la paciente: "siempre tuvo fe, confió en nosotros. Es una mujer muy dulce, nunca se quejó de nada y eso aquí cuenta mucho", expuso.
Sostuvo que sus familiares fueron clave en la recuperación. Sus 11 hijos y nietos a diario le enviaban tarjetas, dibujos y cartas donde le recalcaban lo mucho que la amaban, las ganas que tenían de verla y la falta que les hacía.
Indicó que entre los egresados de la Torre COVID se recuerdan a las personas alegres y las que irradian paz, como Torres Herrera, quien apenas mostró mejoría y empezó a hablarles a todos de Dios, del poder de la oración y de lo importante que es tener fe en la vida.
A diferencia de otras personas que llegan con miedo al hospital, Rosa Carmen entró con semblante de paz, sonriente y cariñosa con el personal médico, algo inusual, en el piso donde se atiende a enfermos de COVID-19.
LA DESPIDEN CON CARIÑO
La especialista en Inhaloterapia, Adriana Leticia Torres Alonso, indicó que la egresada número 100 les dejó un legado de fortaleza y por su valentía: "es ejemplo para otros pacientes".
Personal médico, de enfermería, camilleros y limpieza, le mostraron su afecto cuando se enteraron de su egreso. Se acercaron para darle palabras de aliento y ella respondió con agradecimiento.
Para el personal médico es muy grato ver cómo personas salen victoriosas en la batalla contra el COVID-19, enfermedad que ataca con más ferocidad a los adultos mayores.
"TE TRATAN CON MUCHO AMOR"
La paciente recuperada comentó que el personal del piso 3 fue muy profesional y respetuoso: "yo me voy muy agradecida con el IMSS y sus doctores. Me sentí como en mi casa. La comida estaba bien rica" expresó contenta.
Sus cartas, que no pudo llevarse por estar contaminadas, plasman el amor y el carácter de una paciente memorable. "Adiós a todos, mucha suerte y que Dios los bendiga", le dijo al equipo de médicos y enfermeras que la atendieron y la cuidaron.
Rosa Carmen, quien actualmente vive en la colonia Bellavista en el municipio de Frontera, se despidió con un llamado a la gente para que cuide su salud.